Como
hemos reseñado en el apartado correspondiente, en el último número de la
revista Temas de Antropología Aragonesa aparece un artículo de Jorge Larraga
Motos que, con el título “Los músicos de San Martín de la Virgen del Moncayo”,
relata la historia de la prestigiosa Banda de Música de esa localidad, en los
años 40 del pasado siglo.
Está
ilustrado con fotografías tomadas en varios lugares y, entre ellas, nos ha
sorprendido encontrar la que reproducimos con la leyenda “Los músicos en Vera
de Moncayo, finales de los años 40. Colección de Paco Lamata”.
El
motivo no es otro sino el que, además de la banda, aparece la comparsa de
Gigantes y Cabezudos de Borja: El Rey, la Reina, el Berrugón y la Morica. Pero,
hay otro detalle llamativo. Delante de los gigantes, en primera fila, se
encuentran una serie de personajes, dos de los cuales portan la vara de
alcalde. Uno, el que viste traje claro con la boina en la mano y el otro, con
traje oscuro. A primera vista, creemos identificarlo como D. Ernesto López
Senderos, Alcalde de Borja, entre el 26 de julio de 1936 y el 30 de diciembre
de ese mismo año. Es cierto que un alcalde no lleva la vara fuera de su
jurisdicción, pero tampoco es normal que, en una misma población, haya dos
personas que lleven vara. De la misma forma, que los gigantes se desplazaran a
otro municipio también era algo completamente excepcional, dadas las
dificultades para su transporte.
Por lo
tanto, la presencia de nuestros gigantes y la del alcalde debió responder a
algún acontecimiento importante, acaecido en Vera en la segunda mitad del año
1936. ¿Pudo guardar relación con el monasterio de Veruela, del que habían sido
expulsados los jesuitas por la II República?
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