Fue el 11 de julio de 1706 cuando se presentó ante Borja D. José Camprodón, con fuerzas de caballería e infantería austracista, con el propósito de intimar la rendición de esta ciudad que se mantenía fiel a la causa borbónica.
A pesar de la amenaza de
proceder a la tala de las cosechas, sus habitantes se negaron al requerimiento,
por lo que temiendo la llegada de refuerzos los atacantes se retiraron. Fue el
primer episodio de un conflicto que terminó en el mes de octubre cuando se produjo
el bombardeo y asalto de Borja, con terribles consecuencias.
El comportamiento de los
borjanos mereció, posteriormente el reconocimiento de Felipe V que añadió a sus
armas un león y una flor de lis, junto con la leyenda “Saqueada por ser siempre
fidelísima”, entre otras mercedes, tal como aparece en este grabado, cuyo dibujo
es obra de Buenaventura Salesa.
Desde hace tiempo,
tenemos pendiente la publicación de la historia de aquellos dramáticos
acontecimientos (ya ultimada), algo que queremos volver a retomar para que, al
igual con lo ocurrido en la Guerra de la Independencia, quede constancia de
todo ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario