Aunque el domingo fueron clausuradas brillantemente las Jornadas conmemorativas del 750 aniversario de la Iglesia de Vera de Moncayo, Ana Villalba sigue trabajando en el mural participativo que, en recuerdo de esa celebración, se puede ver, junto a la carretera, en la tapia del llamado “huerto del cura”.
Hemos
seguido los avances realizados y en lo que, hasta hace poco, era un mero
apunte, ayer florecían ya unos girasoles y unas hortensias.
También,
a través de la escotadura de la puerta dibujada en el centro, se adivina ya un
bonito paisaje, aunque Ana nos comentó que aún queda trabajo por realizar.
Otro
recuerdo que quedará de las Jornadas es la pequeña placa de cerámica que, con
el logotipo de las mismas, ha sido colocado en el pórtico de la iglesia
parroquial.
Por cierto, nos llamó poderosamente la atención ese gran arco de medio punto, con dovelas de piedra, que ha aparecido en el derribo de un edificio situado muy cerca del templo y del que nosotros desconocemos a qué construcción pertenecía. Posiblemente, otros lo sabrán pero, desde luego, es un testimonio a estudiar y conservar.
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