Hace un año visitamos el llamado “Espacio Goya” creado por el Ayuntamiento de Magallón en el solar resultante del derribo de un edificio en la calle Goya de esa localidad. Aunque las obras no habían finalizado, llamaba la atención el gran mural cerámico que lo presidía con la imagen del pintor de Fuendetodos, su firma y es escudo de Magallón. Comentábamos entonces que estaba formado por 960 baldosas de cerámica realizadas en el Taller de Muel de la Diputación Provincial de Zaragoza.
Hemos vuelto ahora, para admirar las
reproducciones de ochos obras de Goya que han sido colocadas en la medianería
del edificio contiguo. Son: la familia de Carlos IV y El Quitasol, en la parte
más estrecha. En la otra figuran en la línea superior: “La gallina ciega”; “Los
fusilamientos del 3 de mayo” y “La carga de los mamelucos (el 2 de mayo)”. En
la línea inferior, entre las dos Majas, se ha optado por colocar una de las
pinturas negras del genial pintor, el “Duelo a garrotazos”, algo muy oportuno.
Hace un año, aún se estaba trabajando
en este rincón del Espacio. Ahora, hemos visto allí una carrasca de cierto
porte en homenaje a las víctimas de la pandemia, que nos ha sorprendido por ser
muy diferente a las que, por el Gobierno de Aragón, se repartieron entre todos
los municipios.
En la placa situada debajo puede leerse:
“LUCHA DE GIGANTES. La Villa de Magallón en reconocimiento a la “generosidad,
solidaridad y valentía” de todas las personas que desde diferentes ámbitos
ayudaron a combatir al coronavirus. Y como homenaje a todas las personas que
nos dejaron por culpa de esta maldita pandemia. Que esta Carrasca simbolice la
lucha y el compromiso de la sociedad magallonera contra la COVID 19 y recuerde a
todos los muertos. En Magallón a 14 de septiembre de 2022. Ayuntamiento de
Magallón”.
Hemos reproducido el texto, tal como aparece,
con sus comillas y peculiar puntuación, pero lo mas llamativo es, como hemos
comentado, el tamaño de la carrasca, muy superior al de los pequeños arbolitos
que se plantaron en los restantes municipios. Como no creemos que en Magallón
haya sometida a un tratamiento especial para facilitar su crecimiento, hay que
pensar que es una carrasca diferente, trasplantada este año al Espacio Goya.
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