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         Volvemos a reseñar obras de la donación del Dr. Aguilera Aragón y, en concreto, cuatro pequeñas publicaciones entre las que se encuentra el catálogo de la exposición Jusepe Martínez y su tiempo, presentada en 1982 en el que, entonces, se llamaba Museo e Instituto de Humanidades “Camón Aznar”.

         Al frente de la muestra estuvieron Pilar Camón Álvarez y Wifredo Rincón García, incluyendo el catálogo las colaboraciones de tres destacados especialistas. Alfonso E. Pérez Sánchez escribió un artículo sobre “La pintura española contemporánea de Jusepe Martínez; J. Rogelio Buendía lo hizo sobre “Pintura y Sociedad en torno a Jusepe Martínez” y José Luis Morales Marín fue el autor de los comentarios sobre las obras expuestas.

 

         Tras siete años en los que permaneció cerrado, por obras de remodelación, en 1999 volvió a abrir sus puertas el Museo de Huesca y, con este motivo, el Gobierno de Aragón editó una guía del mismo, prologada por el Consejero de Educación y Cultura D. Vicente Bielza de Ory.

         Junto con la historia del museo, la guía se estructura en dos áreas: Arqueología y Bellas Artes, con textos de Vicente Baldellou, Isidro Aguilera y María Paz Cantero, ilustrados con fotos de Fernando Alvira.

         Siendo Directora General de Patrimonio Cultural, durante la pasada legislatura, Dª. Marisancho Menjón Ruiz, fue editada la cartilla Patrimonio Cultural. Guía práctica para su conservación y mantenimiento, con textos de Sara Gimeno Laporta.

         En ella se explica lo que constituye el Patrimonio Cultural y la importancia de su conservación, con normas concretas de actuación. Está dirigida a todas las personas, aconsejando pautas a seguir en determinados supuestos y con un aviso contundente sobre la ilegalidad del empleo de detectores, incitando a denunciar a quienes los utilizan.

 

         El sacerdote D. Mariano Burriel Rodrigo fue el autor de la obra La cripta de las Santas Masas de la Iglesia Parroquial de Santa Engracia en Zaragoza, publicada en 1979, dos años después de su fallecimiento. Había sido Académico de Número de la R. A. de Nobles y Bellas Artes de San Luis, Consejero de la Institución “Fernando el Católico”, Director del Archivo Diocesano y de la Comisión Diocesana de Archivos y Bibliotecas.

         La obra consta de dos partes, la primera de las cuales está dedicada a la historia de Santa Engracia y sus compañeros mártires, mientras que en la segunda analiza arqueológicamente la iglesia y la cripta donde reposan sus restos.