lunes, 20 de mayo de 2013

El anillo del cardenal



            Cuando el pasado día 5 de mayo, la imagen de Nuestra Señora de la Peana recorrió las calles de nuestra ciudad, de la que es patrona, lucía en su mano derecha un llamativo anillo, cuya procedencia es interesante recordar.




            El anillo, junto con su pectoral, fue entregado a la Virgen, por disposición testamentaria del cardenal D. Vicente Casanova y Marzol (1854-1930), Hijo Predilecto de Borja, a quien le había sido regalado por sus paisanos, al ser preconizado a la sede metropolitana de Granada.
            Fue el 10 de marzo de 1921 cuando se tuvo conocimiento en nuestra ciudad de esa noticia. Inmediatamente, el Alcalde D. Rodolfo Araus Chier hizo público un bando invitando a todos los vecinos a acudir al Te Deum que se cantó en la colegiata de Santa María, así como a engalanar los balcones de todas las viviendas.



La decoración de la fachada no corresponde a esa fecha, sino a la de otra visita a Borja


            La afluencia a Santa María fue masiva, encabezada por la corporación municipal bajo mazas  y con el acompañamiento de la Banda de Música que, posteriormente, ofreció un concierto en el Campo del Toro. La ciudad presentaba un aspecto magnífico con colgaduras en ventanas y balcones que fueron, asimismo, iluminados. Fue entonces cuando se suscitó la idea de abrir una suscripción popular para regalar al nuevo arzobispo un pectoral y un anillo, como expresión del cariño de los habitantes de Borja.
            En el semanario local Ecos del Moncayo se publicaron, a partir de esa fecha, las relaciones de los que contribuyeron, con generosidad, a esta iniciativa. La abrió el propio ayuntamiento con la cantidad de 500 pesetas. En la Casa Consistorial se recaudaron 1.404 pesetas entre los miembros de la corporación, empleados municipales y particulares. En la Escuela Graduada nº 12,55; en la Escuela Graduada nº 2, 21,25; en la Escuela Graduada de Niñas, 19,20; en la Parroquia de Santa María, 246,65; en la de San Bartolomé, 276,75; la Adoración Nocturna entregó 34,75; el Círculo de la Amistad, 400; el Círculo Tradicionalista, 325; el Centro Republicano, 136; el Sindicato Agrícola Católico, 101,25; la Cooperativa de Ntra. Sra. de la Peana, 151,50; la Escuela Unitaria de Niñas, 5,65; la Sociedad de Obreros Católicos, 31,10; la Sociedad Unión Jornalera, 33,50. Finalmente, otros muchos particulares entregaron sus donativos en la Casa Consistorial, alcanzando la suma de 1.162,75 pesetas. En total, hemos podido constatar que se reunieron 4.861,90 pesetas, una cantidad importante teniendo en cuenta que, en aquellos momentos se estaban realizando otras cuestaciones, una para los soldados borjanos en África y otra para la restauración de la ermita de San Jorge, ambas con excelentes resultados.



            La entrega del anillo y del pectoral se efectuó, a finales de octubre de 1921, en la casa que D. Vicente Casanova tenía en la calle Camacho y, donde se encontraba pasando unos días de descanso recuperándose de una grave dolencia que se le presentó durante su visita a Alfaro y que, en un primer momento, llegó a preocupar seriamente.
            Allí se personó el Sr. Alcalde, acompañado por otros miembros de la corporación y diversas autoridades, haciendo entrega de los regalos que, según sus palabras, “manifestaban el cariño, respeto y simpatía de Borja entera hacia su predilecto hijo, pues a la suscripción habían contribuido todos, ricos, pobres, blancos, amarillos, sin distinción de clases ni de partidos, pues el cariño de Borja hacia el Excmo. y Rvdmo. Sr. Casanova es unánime”.



            El nuevo arzobispo agradeció esa muestra de cariño, correspondiendo a ella con la entrega del retrato que le había realizado D. Baltasar González que el Sr. Alcalde se comprometió a colocar en lugar preferente de la Casa Consistorial.



            El anillo es de oro y lleva engarzada en el chatón, entre un círculo de brillantes,  una amatista, la piedra más utilizada en los anillos episcopales, por ser de color morado, aunque históricamente se ha usado todo tipo de piedras preciosas, salvo las de color verde.


  
          Es uno de los símbolos de la dignidad episcopal y lo recibe en el momento de su ordenación, como expresión de su desposorio con la Iglesia, mientras el ordenante pronuncia las siguientes palabras: “Recibe este anillo, signo de fidelidad, y permanece fiel a la Iglesia, Esposa Santa de Dios”. Su uso está documentado, al menos, desde el siglo VII y originalmente solía ser destruido a la muerte del prelado aunque, posteriormente, se introdujo la costumbre de donarlo a una iglesia o santuario, como ocurrió en el caso que estamos comentando. Este anillo siguió utilizándolo tras ser creado cardenal en 1925, aunque en ese momento recibió del Pío XI otro anillo con las armas pontificias grabadas en su aro, como ocurre con todos los nuevos cardenales.







3 comentarios:

  1. El cuadro del Cardenal Casanova ha estado en el despacho del Sr alcalde hasta hace unos años que se retiro de dicho lugar.¿ha vuelto a su ubicación?

    ResponderEliminar
  2. El retrato del cardenal volvió a su emplazamiento habitual al comienzo de esta legislatura.

    ResponderEliminar
  3. Gracias por la información. Nunca entendí por que fue retirado el cuadro del lugar donde había estado siempre.
    ¿Molestaba por ser un el retrato de un cardenal? Menudos prejuicios ¿no? como los del que el artista que lo pinto siendo republicano..... ver para creer

    ResponderEliminar