Obras de nuestros museos: El Paleolítico medio

Hace sólo unas décadas el mapa de los hallazgos de esta época en el valle del Ebro mostraba un vacío total en lo que se refiere a nuestra comarca. Hoy gracias a los trabajos del Centro de Estudios Borjanos esta situación es muy diferente y el panorama se va completando día a día. Muestra de ello es la vitrina número uno del Museo Arqueológico dedicada al Paleolítico, de la que ya dimos cuenta de los hallazgos relacionados con el Paleolítico inferior que en ella se exhiben. Ahora vamos a comentar un conjunto de herramientas y restos de talla producidos por el Hombre de Neandertal y que se denomina genéricamente como industria musteriense, ya que el yacimiento donde por primera vez se definió fue Le Moustier, en la Dordoña francesa. Estamos en el periodo prehistórico que se denomina Paleolítico medio que se desarrolla entre el 125.000 al 35.000 antes de Cristo.

La primera característica que salta  a la vista es que las piezas que vemos ya no son útiles macizos, hechos sobre soportes gruesos como el Paleolítico inferior. Ahora son mucho más pequeños y ligeros, están confeccionados con trozos más o menos planos de sílex que llamamos lascas y que fueron extraídos de núcleos bien trabajados. La variedad de útiles es mucho mayor, hay raederas, raspadores, cuchillos, denticulados, etc, lo que indica una mayor complejidad en las acciones para procesar las materias primas.

En nuestra comarca hay una presencia notable de yacimientos de esta época, todos ellos al aire libre, por ahora ninguno en cueva, lo que nos indica que estas gentes recorrieron este territorio en época de clima benigno, fuera de las etapas glaciares. Como hemos dicho se trata de yacimientos al libre que son los restos de los campamentos nómadas en los que se organizaron esas poblaciones, esta circunstancia ha provocado que los restos más deleznables, como huesos y carbones hayan desaparecido, lo que limita mucho la información sobre sus modos de vida. Estamos todavía ante una economía depredadora de cazadores-recolectores, organizados en grupos no muy numerosos que explotan amplios territorios por los que se desplazan en busca de recursos: Por los datos obtenidos en yacimientos en cueva del valle del Ebro y podemos extrapolar aquí sabemos que cazaban ciervos, cabras montesas y caballos como presas grandes y, sobretodo, conejos. Compartieron esas presas con lobos, osos y hienas.

Hay yacimientos de este periodo en Litago, Ambel, Pozuelo de Aragón y Borja y hallazgos aislados de herramientas en muchos otros sitios. En concreto los dos conjuntos que se pueden ver en esta vitrina corresponde a dos importantes sitios borjanos: El Raso Bajo y Aster ambos en la Muela de Borja, cercanos entre sí y con composiciones muy similares, por lo que se puede relacionar con estancias del mismo grupo humano.