Detenido de nuevo el marroquí que presuntamente actuó en Fontellas

            Recientemente dimos cuenta del incendio provocado en la iglesia de Fontellas, a consecuencia del cual quedaron destruidas dos imágenes de la Virgen, entre ellas la de la Patrona de la localidad, y dañado seriamente el conjunto artístico del templo.

            A raíz de esos hechos fue detenido un ciudadano marroquí, residente en Tudela, como presunto autor de los mismos. Tras ser imputado por un delito contra el patrimonio histórico, el juez lo puso en libertad con cargos, imponiéndole la “prohibición de acercarse o entrar en edificios, centros o lugares que tengan uso de culto religioso católico, así como cualquier acto de este contenido, estando vigente esta medida hasta la finalización de la causa bien por archivo bien por sentencia firme”.

            Sin embargo, ayer volvió a ser detenido tras ser denunciado por el párroco de Ribaforada, al aparecer derribada la cruz que corona el hastial de la antigua iglesia parroquial. Aunque inicialmente, habíamos creído que se trataba del nuevo templo, las informaciones recabadas, con posterioridad, han precisado que era la cruz de piedra que existía en la otra, la cual quedó destrozada.

Tras confesar los hechos ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción nº 3 de Tudela, como presunto autor de un nuevo delito contra el patrimonio y otro de quebrantamiento de condena (así aparece tipificado en el Código Penal aunque, como en este caso, se trate de un quebrantamiento de medida cautelar).

  . Según el informe emitido por la Guardia Civil, la conducta del imputado responde a una radicalización de carácter religioso, sin que se vea afectada por consumo de alcohol o drogas ni en principio, salvo estudios posteriores, a una alteración mental.

            Cuando, anoche, ya habíamos redactado este artículo, a partir de las informaciones ofrecidas por diversos medios de comunicación, un colaborador de nuestro Centro nos ha hecho llegar esta fotografía en la que aparece destrozada la imagen de San Bartolomé, patrón de esa localidad, lo que añade especial gravedad a lo ocurrido. Hoy la reproducen ya en diferentes páginas, junto con la de la cruz destrozada, anunciando para mañana sábado un acto de desagravio.

            Hay que recordar que Ribaforada se encuentra a 17 kilómetros de Mallén y a poco más de 30 de Borja, por lo que lo relatado no acontece en remotas regiones, sino a las puertas de nuestra comarca.