El pasado miércoles, en la sección “Hace 50 años” que diariamente publica Heraldo de Aragón, se dedicaba un recuerdo a D. Francisco Domínguez Pablo quien, a sus más de 40 años, estaba estudiando el Bachillerato, al mismo tiempo que desempeñaba el puesto de conserje en la Sección Delegada Mixta del Instituto “Goya” en Borja.
Conservamos en nuestro archivo la entrevista
que el 22 de junio de 1972 le efectuó Milagros Heredero. En ella destacaba el
esfuerzo de este personaje que, a sus 44 años, estaba examinándose de las
asignaturas de quinto de Bachillerato que también cursaba su hija.
Milagros Heredero es una famosa periodista y escritora,
nacida en Madrid. En la capital de España comenzó colaborando en varios medios
periodísticos y, posteriormente, residió doce años en Zaragoza, donde fue redactora
de reportaje diario en Heraldo de Aragón. Después ejerció como corresponsal
política del mismo periódico y de Aragón Express en el Congreso de los
Diputados y Senado. Es autora asimismo de varias novelas y ensayos.
Francisco Domínguez terminó el Bachillerato
y, aunque en la entrevista, había manifestado su aspiración de estudiar
Derecho, decidió consolidar su situación laboral presentándose a las pruebas
para optar a la plaza de Secretario en el Instituto borjano. Fue viajando a Pamplona
cuando encontró la muerte a consecuencia de un accidente de carretera.
Al cumplirse los 40 años de su muerte,
el Centro de Estudios Borjanos le dedicó un homenaje, publicando una selección
de sus artículos. Francisco Domínguez había sido uno de los principales
colaboradores de nuestro Centro, en sus primeros momentos. Corresponsal de Heraldo
de Aragón y encargado de la Biblioteca Municipal, fue uno de los principales
impulsores de la Cultura en Borja.
Escribía muy bien, haciendo gala de una
ironía que, en algunas ocasiones, le ocasionó problemas. Había iniciado sus
colaboraciones en el periódico local Lauro y también fue redactor en la primera
etapa de Radio Moncayo. Pero fueron las páginas del Heraldo las que acogieron
sus crónicas y artículos que contribuyeron a proyectar la imagen de nuestra
ciudad como escenario de múltiples iniciativas culturales.
El recuerdo que le dedicó ayer Heraldo
de Aragón, vino a traer a nuestra memoria los muchos momentos que compartimos
con él, soñando entre todos con una Borja renacida del letargo experimentado durante
varias décadas.
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