Uno de los más conocidos e importantes fotógrafos de Zaragoza, en el primera mitad del siglo XX fue Gustavo Freudenthal (1869-1948), un prusiano de Hannover que, con 23 años, llegó a España sin ningún conocimiento fotográfico. Comenzó a formarse en la Compañía Fotográfica Napoleón, de Barcelona, una empresa familiar fundada en 1851, que fue pionera en España. Allí estuvo seis años hasta que, en 1898, se trasladó a Madrid para trabajar en otro prestigioso estudio fotográfico, el de Christian Franzen.
Christian Franzen (1864-1923) era un
diplomático danés que se estableció en la capital de España donde se convirtió
en un afamado fotógrafo. Fue quien inmortalizó a los más destacados personajes
de la vida política y social de la época. Fue también fotógrafo de la familia
real y uno de los primeros en publicar sus trabajos en los medios de comunicación
social. Tenía su estudio en la calle del Príncipe 11, donde Freudenthal completó
su formación.
Llegó a Zaragoza en 1906, abriendo su
estudio en la calle Coso 31, con el nombre de “Art-Studio G. Freudenthal” que
aparece al pie de todos sus trabajos, de los que conservamos bastantes en
Borja. Es significativo el hecho de que, el año anterior, había obtenido el
nombramiento de fotógrafo de la Casa Real, posiblemente con la ayuda de su
mentor.
Estos dos retratos pertenecen a nuestros
fondos, el segundo de los cuales ha sido donado por Dª. Teresa Bayod, mientras que
el primero formaba parte del legado Sánchez del Río.
Pero hay también fotografías suyas en poder de particulares, como esta bonita serie de retratos que se conservan en un palacio borjano, junto con otros del mismo autor.
El emperador Guillermo II lo nombró, en
1914, Cónsul honorario de Alemania en Zaragoza. Con la llegada de Hitler al
poder, quisieron que dimitiera, pero lo cierto es que mantuvo su puesto hasta
1941. De su labor como cónsul y como fotógrafo, Javier Turrión Berges publicó
una interesante obra que lleva por título Gustavo Feudenthal, cónsul de
Alemania en Zaragozas y fotógrafo de la Real Casa.
Todas las fotografías que hemos podido ver
en Borja fueron realizadas en su estudio del Coso 31, pero en 1917 abrió un
nuevo estudio en el ático de la sede del Banco de Aragón (junto al reloj), que
acababa de ser inaugurado.
Este edificio, situado en el nº 42 del Coso, fue proyectado por
el arquitecto cubano de origen asturiano Manuel del Busto Delgado, sobre el solar
de lo que había sido palacio del marqués de Campo Franco. En sus bajos estuvo
un restaurante que algunos de nuestros lectores recordarán: el famoso Savoy.
Pero, además, destacó como periodista
gráfico y llegó a ser Director Artístico de Heraldo de Aragón. Sus fotografías
aparecieron también en ABC o en revistas tan importantes como La
Ilustración Española y Americana.
Como testigo de su época, tuvo ocasión
de dejar constancia de muchos acontecimientos acaecidos en la capital aragonesa,
como la visita de Albert Einstein en 1923. Su obra ha sido objeto de especial
atención y, en 2012, la Universidad de Zaragoza y la Real Sociedad Fotográfica
de Zaragoza, le dedicaron una exposición en el Paraninfo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario