La Grand Place de Bruselas es una de las más hermosas del mundo y, desde 1988, es Patrimonio de la Humanidad. Entre los monumentos que la conforman se encuentra la llamada “Casa del Rey” que, en su origen, fue un edificio de madera donde se vendía el pan. Más tarde acogió servicios administrativos del duque de Brabante y fue Carlos V quien la reedificó en estilo gótico tardío. Junto con la mayor parte de los edificios de la plaza, quedó arrasada en el transcurso del bombardeo de 1695 por las tropas francesas y fue en 1873 cuando la ciudad la reconstruyó en estilo neogótico.
En su interior se encuentra el Museo de
la Ciudad que permite admirar, tanto las piezas expuestas como la arquitectura
del edificio.
Pero lo que hoy queremos resaltar es el
cuidado con el que se conservan muestras heráldicas relacionadas con España,
algo que contrasta notablemente con lo que ocurre en otras partes en las que la
incultura y el sectarismo provocan la destrucción de obras consideradas
políticamente incorrectas, al margen de su valor artístico e histórico,
recurriendo si es preciso a disposiciones legales.
Del antiguo palacio mandado construir
por Carlos V, se conservan las armas de Aragón (a las que corresponde la
imagen), junto con las de otros territorios como Austria, Nápoles, Borgoña y
Granada.
Lo mismo sucede en la preciosa vidriera
de la escalera principal del edificio. Allí están lo símbolos heráldicos de Aragón,
Navarra, Castilla, León y Granada, entre todos los demás de la monarquía
hispana. Podríamos poner otros muchos ejemplos de escudos relacionados con nuestros
reyes que podemos encontrar en diferentes lugares y monumentos, sin que a nadie
se les haya ocurrido destruirlos intencionadamente, aduciendo excusas que suelen
prosperar cuando falta cultura.
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