Los recientes homenajes tributados a Dª. María Domínguez Ramón a raíz del descubrimiento e identificación de sus restos en el cementerio de Fuendejalón, donde fueron enterrados tras su fusilamiento en 1936, han vuelto a suscitar la polémica sobre la identidad de la primera mujer que rigió una corporación municipal en España, honor que unos hacen recaer en Dª. María Domínguez, mientras que en Cataluña se reivindica la figura de Dª. Natividad Yarza.
El pasado domingo, el Prof. D.
Guillermo Fatás Cabeza en su habitual artículo de los domingos en Heraldo de
Aragón expresaba su opinión bajo el título “La primera alcaldesa fueron
más”. En su escrito señalaba que ni Dª. María Domínguez ni Dª. Natividad Yarza
fueron las primeras alcaldesas. De María, además, señala que fue Presidenta de
la Junta Gestora del Ayuntamiento de Gallur y no elegida, sino nombrada por el
Gobernador Civil.
En diversas circunstancias nos hemos
ocupado de esta cuestión, en aras a dar a conocer la verdad histórica, a pesar
de los recelos que suscitaban nuestras opiniones. El artículo del Prof. Fatas viene
a coincidir en varios de los aspectos señalados por nosotros, aunque sigue
siendo necesario aclarar otros, al mismo tiempo que damos a conocer un “descubrimiento”
que hemos efectuado tras la lectura de su artículo y que, en nuestra opinión,
es muy importante.
En el artículo que estamos comentando,
D. Guillermo Fatás menciona a otras mujeres que fueron nombradas alcaldesas
durante la Dictadura de Primo de Rivera y, por lo tanto, todas ellas anteriores
a Dª. María Domínguez. Entre ellas cita a algunas de las que ya dimos noticia
en este blog, acompañando sus reseñas biográficas con sus imágenes.
Eran Dª. Matilde Pérez Mollá que fue
nombrada alcaldesa de Quatretondeta (Alicante) el 27 de octubre de 1924; Dª. Concepción
Pérez Iglesias nombrada alcaldesa de Portas (Pontevedra) en enero de 1925; Dª. Dolores
Codina Arnau, nombrada alcaldesa de El Taladell (Lleida) en 1927; Dª. Benita
Mendalio, nombrada alcaldesa de Bolaños de Campos (Valladolid) en 1926, de la
que no disponemos de su fotografía; y Dª. Petra Montoro Romero, nombrada alcaldesa
de Sorihuela de Guadalimar (Jaén).
Se suele aducir que todas ellas fueron
designadas y no elegidas democráticamente, lo cual es cierto pero también lo es
que tampoco fue elegida Dª. María Domínguez, a pesar de lo que suele afirmarse,
sino que, como en los casos anteriores, fue nombrada por el Gobernador Civil.
Además, entre las citadas hay un caso
especialmente lamentable, el de Dª. Petra Montoro Romero, dado que fue fusilada
el 29 de noviembre de 1936 junto con sus hermanas Marta y Natalia. Tenía 63
años y sus hermanas 66 y 69 respectivamente. Los autores de este crimen,
equiparable al de Dª. María Domínguez, no fueron miembros de las fuerzas
sublevadas, sino milicianos republicanos.
Pero en el artículo del Prof. Fatás se
menciona a otras dos “alcaldesas” de la Dictadura de Primo de Rivera de las que
no teníamos noticia. Una es Dª. Amparo Mata Pérez que lo fue de Sotobañado
(Palencia) y la otra es Dª. Candela Herrero del Corral, de Castromocho
(Palencia). Precisamente, ha sido al estudiar la biografía de esta última
cuando hemos encontrado un dato de extraordinaria importancia que luego comentaremos.
En primer lugar, queremos referirnos al
caso de Dª. Natividad Yarza Planas (1872-1960) que ha venido siendo considerada,
no sin cierta razón, como la primera alcaldesa elegida democráticamente en
España. Efectivamente, en las elecciones celebradas el 14 de enero de 1934,
encabezó, como independiente, la candidatura de Esquerra Republicana en la
localidad de Bellprat (Barcelona). Maestra de profesión, ya se había hecho
cargo de la comisión gestora de ese ayuntamiento con anterioridad. Al finalizar
el curso de 1933-1934 fue trasladada a La Pobla de Claramunt y tuvo que dejar
el cargo, aunque otros autores afirman que fue destituida, tras la revolución
de octubre.
Al estallar la Guerra Civil tenía 63
años, pero no dudó en alistarse en la columna organizada por el PSUC, al mando
de Luis del Barrio Navarro, marchando con ella al frente de Aragón. Exiliada en
Francia, en 1939, estableció su residencia en Toulouse, donde falleció, como
consecuencia de una caída, el 16 de febrero de 1960.
Se da la circunstancia de que, aunque
nacida en Valladolid, era hija de D. Manuel Yarza Lavilla, natural de Brea de
Aragón, y de Lorenza Planas, de Huarte (Navarra). El padre trabajaba como
zapatero para el Ejército, razón por la cual su hija vino al mundo en esa
ciudad castellana, así como sus dos hermanos, Bernarda y Mariano.
Posteriormente, la familia se trasladó a Barcelona, aunque los estudios de
Magisterio los cursó en Huesca.
El honor de ser la primera alcaldesa
elegida por sufragio popular que solía ser atribuido a Dª. Natividad Yarza debe
corresponder, a luz de nuestro descubrimiento, a Dª. Candela Herrero del Corral
que, como hemos visto, había sido nombrada en 1930 para ejercer el cargo
durante la Dictadura de Primo de Rivera.
Pero lo que ignorábamos es que se había
presentado a las elecciones de 1897, logrando ser elegida alcaldesa de
Castromocho, localidad de la que ya había sido alcalde su tío D. Crisanto
Herrero Alegre que, asimismo fue Diputado a Cortes por la Unión Liberal.
Perteneciente a una distinguida
familia, en la que destacaron su hermana Sor Josefa Herrero del Corral, considerada
santa, y su sobrino el matemático D. José del Corral Herrero, Candelas fue una
gran alcaldesa, muy querida en su pueblo, donde llevó a cabo numerosas reformas.
Podríamos extendernos mucho más en su biografía, pero nos limitaremos a señalar
que, por el momento, es la primera alcaldesa de España en fecha tan remota como
1897.
Volviendo al caso de Dª. María
Domínguez ya hemos visto que, en sentido estricto, no puede ser considerada la “primera
alcaldesa democrática de la Segunda República Española” ni mucho menos de la
historia de España. Fue Presidenta de la Junta o Comisión Gestora nombrada por
el Gobernador Civil de Zaragoza, tras la dimisión de todo el Ayuntamiento de
Gallur, elegido democráticamente. Tampoco fue maestra, como afirmaba el Prof.
Fatás. Quiso serlo, pero tuvo que abandonar los estudios por causa de
enfermedad, aunque mantuvo su vocación e impartió clases particulares con gran
dedicación.
Quizás, lo más interesante, tras conocer
cómo fue nombrada es el saber por qué fue cesada muy pronto. Tras haber sido designada
por el Gobernador Civil el 27 de julio de 1932, para presidir la Comisión
Gestora de Gallur, a finales de ese año se modificó la ley que regía la designación
de esas Comisiones Gestoras que, a partir de ese momento, debían estar formadas
por un representante de los propietarios, otros de los sindicatos y un
funcionario. Cuando las nuevas normas se pusieron en práctica en Gallur, los
miembros de la UGT de Gallur eligieron para ser representados a D. Pablo Royo
Navarro, quedando apartada de sus funciones como Presidenta Dª. María Domínguez,
a pesar de que había sido fundadora de la UGT local. Por lo tanto, Dª. María
Domínguez fue nombrada para el cargo por el Gobernador Civil y cesada por sus
compañeros de la UGT.
También en 1933, el Gobernador Civil de
Zaragoza D. Manuel Andrés nombró a buen número de mujeres para presidir las
Comisiones Gestoras de varios ayuntamientos de la provincia. Como en toda
España se tomó la decisión de que para garantizar la correcta celebración de
las elecciones que iban a tener lugar en abril de 1933, se hicieran cargo, en
enero de ese año, unas comisiones gestoras en todos los ayuntamientos. El que
varias de ellas fueran presididas por mujeres llamó la atención y los medios de
comunicación se hicieron eco de ello. En el reportaje que reproducimos, se ve a
todas las de la provincia fotografiadas junto al Gobernador Civil y Dª. María
Domínguez a la que se refieren como “primera mujer que presidió un Ayuntamiento
español”. Eso y el uso de la palabra “alcaldesa” es un error que, como hemos
visto, se ha mantenido hasta nuestros días.
Conviene recordar que, entre esas
efímeras “alcaldesas” (ejercieron como Presidentas poco más de cuatro meses, se
encontraba varias maestras de nuestra comarca. La más joven (tenía 23 años) era
Dª. Isabel Conrada Pemán Cardesa, Presidenta de la Comisión Gestora de
Magallón, la única de la que tenemos fotografía.
Las otras fueron Dª. Cecilia Latre Cañada, en Bureta y Dª Francisca Laguía Bernal, en Novillas. Además, en Pozuelo de Aragón la localidad natal de Dª. María Domínguez Remón, formó parte de la Comisión Gestora Dª. Casimira García Pardo, aunque el Presidente era D. Julio Jarreta Gil que representaba a los propietarios.
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