Dª. María Luisa Pablo
Arcos nos ha permitido escanear esta interesante fotografía correspondiente a
una representación de la zarzuela No se
pescan truchas, en la que si bien no conocemos la fecha exacta, han sido
identificadas todas las participantes que relacionamos a continuación:
De pie y de izquierda a
derecha aparecen: Pilar Pérez, Mª Luisa Pablo Arcos, Pilar Pelegrín, Pilar
Tejero, Pilar Adán, Pilar Aguilera y Felisa Serrate.
Sentadas y también de
izquierda a derecha están: Pilar Tejadas, Milagros Nadal, Consuelo Rodríguez,
Marina Calahorra, Nieves Pardo, Catalina Bernal y Carmen Ballesta. Las que
están arrodilladas son: Isabel Castellot, Concepción del Caso, Pilar Sanz,
Pilar Almau y Carmen Crisólogo.
En el
Centro de Estudios Borjanos ya teníamos otra fotografía con los actores que
participaron, años antes, en el estreno de esta zarzuela, cuya música fue
compuesta por el compositor borjano D. Ángel Pereda Matud (1867-1919), hermano
del sacerdote D. José María Pereda (1874-1948), autor también de otra zarzuela
titulada Una y no más.
El
libreto de No se pescan truchas fue
escrito por D. Baltasar González y D. Juan Manero, al que no se suele citar en
las contadas ocasiones en las que se ha comentado esta obra, de la que en el
archivo de nuestro Centro se conserva una copia de la partitura que está
dividida en Preludio, Coro de las lecheras, Coro de los hombres, couplets, Dúo
de Dolores y Luis, Seguidillas, Plegaria y Jota final.
La
parte que más se popularizó fue el coro de las lecheras, cuya primera estrofa
decía así:
Como la nieve que, en el Moncayo,
en alta cima brillar se ve,
así es la leche de nuestras cabras
que aquí traemos para vender,
para vender.
Menos conocido es el hecho de que la
plegaria está dedicada, precisamente, a la Virgen de Misericordia y la
interpretaba Luis, el protagonista:
Virgen de Misericordia
que estás viendo desde el cielo
las angustias de mi alma,
atiende amante a mi ruego
(bis)
Oye mi súplica, mira mi llanto,
Virgen piadosa haz un milagro.
(bis)
Era
una época en el que las circunstancias favorecían la actuación de grupos
teatrales de aficionados que representaban tanto obras teatrales como se atrevían
a interpretar zarzuelas que, como hemos visto, preparaban autores nacidos en
nuestra ciudad.
La
tradición teatral la sigue manteniendo ahora el grupo Helikón y, aunque se
sigue recordando una obra más reciente, como es la del maestro Borobia, titulada
La romería, nadie se ha atrevido a rescatar estas zarzuelas borjanas ni obras
teatrales tan simbólicas como Flor de
Adelfa, de Emilio Alfaro Malumbres, que constituye todo un símbolo para la
historia de Borja.
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