Ayer tuvo lugar en el Salón de Actos de la Casa de Aguilar el primer acto organizado por el Centro de Estudios Borjanos, desde que comenzó la actual pandemia. Las normas sanitarias aún en vigor, obligaron a restringir el aforo al 75 %, lo que planteó serios problemas, dado el interés que había despertado la presentación de la nueva novela de Luis Zueco, y hubo un buen número de personas que no pudieron acceder al salón.
Intervino
en primer lugar el Presidente del Centro, destacando la brillante trayectoria
de este novelista borjano, cuyo éxito queda patente por el hecho de, pocos días
después del lanzamiento de El cirujano de
almas, ya está a la venta su segunda edición. Otro tanto ha ocurrido con
novelas anteriores, como El Castillo
que va por la 15ª edición en tapa dura (algo poco frecuente) a las que hay que
sumar las editadas en tapa blanda y las traducciones que de ella se han hecho.
Por otra parte, como ya hemos comentado en este blog, acaba de regresar de
Cartagena donde le fue entregado el prestigioso Premio “Ciudad de Cartagena” de
Novela Histórica, por su obra El mercader
de libros, publicado poco antes del pasado confinamiento, a pesar de lo
cual ha tenido un enorme éxito.
En
su intervención, Luis Zueco relató la génesis y el desarrollo de su novela,
recorriendo los distintos escenarios en los que transcurre la trama, ambientada
en un momento histórico especialmente significativo para la Historia de España
y, sobre todo, para la transformación de la Medicina.
Comentó
que ha querido hacer una obra asequible a todos los públicos, reduciendo
incluso el número de páginas inicialmente previstas. Destacó también la acogida
que está teniendo desde el primer momento y agradeció el apoyo que le dispensan
sus numerosos lectores, lo que quedó patente en Borja, donde también tiene un
gran número de seguidores.
Tras
responder a las cuestiones que le fueron planteadas, procedió a la firma de
ejemplares, de una manera ordenada, pues eran muchos quienes deseaban adquirir
la obra. Afortunadamente, hubo para todos, teniendo en cuenta que también hubo
bastantes que traían su correspondiente ejemplar para que les fuera firmado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario