Hace tiempo que no habíamos podido informar sobre el avance
de la rehabilitación del palacio de Bulbuente y de su acondicionamiento como
establecimiento hotelero. Las circunstancias que estamos atravesando nos habían
impedido desplazarnos hasta allí para visitar las obras. Sin embargo, D. Manuel
Giménez Aperte y D. Luis Zueco Giménez nos acaban de informar acerca del
espectacular cambio operado, pues ya se está acometiendo la fase final y, en
concreto, tras la terminación de las habitaciones de la planta superior, se
prosiguen los trabajos en la planta principal.
Nos han traído imágenes del estado en el que ha quedado la
planta inferior del torreón, cuya pavimentación estaba pendiente. Se ha dejado
abierto un espacio junto al muro actual, para permitir ver el anterior,
separado unos centímetros, que fue descubierto en el transcurso de la
investigación arqueológica previa.
El exquisito cuidado con el que se ha trabajado permitió
descubrir elementos decorativos ocultos. En concreto, dos magníficas puertas
rematadas con arcos conopiales, como la encontrada en el salón principal.
Precisamente allí, al comenzar las obras de pavimentación y revoque es cuando
inesperadamente han encontrado, bajo la ventana que le da luz, estos dos
poyetes o “festejadores”, como se les conoce, que estaban tapadas por un
tabique.
Especial atención se ha dispensado a los grafitos existentes
en los muros. Comoquiera que, en el transcurso del tiempo, han sufrido
recrecimientos y revoques sucesivos, los hay de diferentes épocas, todos los
cuales han sido minuciosamente calcados e inventariados.
Ahora, en el mismo salón al que hacíamos referencia y en un
paramento del siglo XIV, han encontrado esta pintura que, por la forma de su
pico, creemos que se trata de la representación de una rapaz, posiblemente un
azor. Es llamativo el color ocre utilizado para pintarlo.
Hasta ahora, no se habían encontrado marcas de cantero en
los sillares de los muros del torreón. Muchos de ellos proceden de épocas
anteriores por lo que no es lógico que las hubiera. Pero, en los medievales,
cabría esa posibilidad. En ese sentido, las que muestran la imagen, parecen
sugerirlo, aunque no es seguro.
Tan pronto como sea posible, volveremos a Bulbuente para
conocer los avances efectuados en una de las obras más importantes y de mayor
trascendencia de nuestra comarca, realizada merced a la iniciativa privada y al
compromiso personal de sus impulsores.
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