La incansable actividad de Adi Gamliel se ha proyectado
también a una amplia serie de postales y fotografías en blanco y negro que
conservamos en nuestra colección, las cuales ha coloreado, con un resultado que
está en función de la calidad de los originales.
Especialmente bueno es cuando aborda detalles
arquitectónicos del claustro del monasterio, como esa preciosa ménsula o la
sucesión de arcos y columnas que configuran la entrada a la Sala Capitular.
Pero también ha trabajado sobre vistas exteriores de este
monumento, orgullo de nuestra zona, sobre el que podemos adelantar que acabamos
de adquirir un álbum de fotografías inéditas de la época en la que fue
noviciado de la Compañía de Jesús. Estamos a la espera de recibirlo e
informaremos de ello en su momento.
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