Otros hallazgos en Bulbuente

         Cuando una restauración se efectúa con cuidado, pueden recopilarse hallazgos, aparentemente intrascendentes, que aportan datos interesantes que pueden ser objeto de estudio.

         Así ha ocurrido en el palacio de Bulbuente, desde donde D. Manuel Giménez Aperte nos ha enviado esta imagen de un ladrillo encontrado en el hogar o cocina de la adjunta Casa Parroquial, ahora incorporada al conjunto monumental.

         En él aparece el sello “Pablo Sierra. Borja” que puede corresponder a una fábrica de estos materiales, existente en nuestra ciudad a finales del siglo XIX y comienzos del XX, de la que sin embargo no teníamos noticia. Es posible que alguno de nuestros lectores pueda aportar algún dato si realmente “Borja” es topónimo y no el segundo apellido del fabricante.

         Otra curiosidad es esta ajada fotografía de un coronel que lleva por título “Tella” y el nombre del autor, el fotógrafo zaragozano Jalón Ángel.

         En este caso, hemos podido identificarla inmediatamente, pues pertenece a la serie “Forjadores del Imperio” que el conocido fotógrafo realizó a comienzos de la Guerra Civil. El personaje retratado es el entonces coronel D. Heliodoro Rolando de Tella y Cantos, de brillante trayectoria y triste final, represaliado por el régimen por sus convicciones monárquicas que le llevaron a tomar parte en un complot para sustituir al Jefe del Estado por D. Juan de Borbón.

         D. Heliodoro Rolando de Tella (1888-1967) había nacido en Adai (Lugo) y fue compañero de Franco en la Academia de Toledo. Participó en la guerra de Marruecos, siendo distinguido con la Medalla Militar individual (1923) y la Laureada de San Fernando (1925), logrando ascender por méritos de guerra a Primer Teniente (Capitán), Comandante y Coronel. En esta foto aparece vistiendo el uniforme de caballero de la Orden Militar del Santo Sepulcro de Jerusalén, a la que pertenecía.

         Era, por lo tanto, un militar muy destacado al que la Guerra Civil sorprendió en el empleo de Coronel, al mando del Tercio Gran Capitán, primero de la Legión, con el que tomó parte en numerosas acciones, siendo habilitado como General de Brigada el17 de abril de 1938, por lo que la foto hallada en Bulbuente es anterior a esta fecha.

         Al finalizar el conflicto fue nombrado Gobernador Militar de Burgos y posteriormente de Lugo. Pero su carrera se truncó en 1943, al ser separado del Ejército por fallo de un Tribunal de Honor. Privado de su condición militar, fue confinado en Albacete, hasta que pudo regresar a Lugo donde permaneció el resto de su vida.

         La razón de la condena fueron las irregularidades cometidas al utilizar camiones del Ejército para las obras de su pazo. Pero eso era algo frecuente en la época y lo que, en realidad, la había motivado eran las profundas convicciones monárquicas del general, denunciado por los Servicios de Inteligencia alemanes, dado que era partidario de los aliados, por su implicación en una conjura que pretendía la reinstauración de la monarquía en la persona de D. Juan de Borbón. En ella estaban comprometidos otros destacados militares como el general Aranda, también represaliados.

         Las actividades promonárquicas y democráticas de Tella continuaron, colaborando con la duquesa de Valencia Dª. Luisa María Narváez, la primera “Duquesa Roja”, que terminó en la cárcel. También se dio ese apelativo más tarde a la duquesa de Medina Sidonia, Dª. Luisa Isabel Álvarez de Toledo.

         El general Tella entró también en contacto con D. José María Gil Robles para crear un partido demócrata cristiano. En la reunión mantenida con antiguos miembros de la CEDA y destacados monárquicos, Tella estuvo en la presidencia junto con D. Enrique Tierno Galván.

         Sirvan estas líneas como recuerdo a un militar importante cuya imagen ha aparecido oculta, por razones desconocidas, en ese edificio de Bulbuente.