Es posible que muchos ignoren quién es el personaje al que está dedicada esta calle de Fuendejalón. Así nos ocurrió a nosotros, cuando redactamos el Diccionario Biográfico, en el que no pudimos incluirlo por no haber encontrado datos sobre el mismo.
Pero, el 14 de enero pasado, apareció
en la sección “Hace 100 años” de Heraldo de Aragón, esta reseña sobre la
velada literaria celebradas el 6 de enero de 1922, para inaugurar la biblioteca
escolar de Fuendejalón y “honrar la memoria de D. Demetrio Senac y Vicente (q.e.p.d.),
maestro muy querido, que fue durante quince años de Fuendejalón y fundador de
dicha Biblioteca”.
A pesar de no haber encontrado datos
precisos sobre su biografía, a través de las resoluciones publicada en la Gazeta
de Madrid, hemos podido constatar que tenía el título de “Maestro Superior”
(los había también con el de “Maestro elemental”) y que, encontrándose destinado
en Fuendejalón tomó parte en los concursos de traslados de 1902, 1903 y 1904, optando
a las plazas de Tafalla, Épila, y Cariñena en los dos primeros, lo cual parece
razonable dado que estaban dotadas con 1.100 pesetas frente al sueldo de 825 que
percibía en Fuendejalón. Lo que ya resulta más llamativo es que en el concurso
de 1904 optara a la plaza de Alfocea que era de igual categoría que
Fuendejalón. En ningún caso pudo conseguirlas, pero en 1918 hemos encontrado
que ascendió a la categoría 7ª de escalafón, dotada con 2.000 pesetas. No
sabemos dónde se encontraba destinado entonces, pero su fallecimiento tuvo que
producirse antes de 1922.
En cuando a su familia directa, sabemos
que tenía un hermano, Clemente Senac y Vicente, que en 1899 era Médico Mayor del
Cuerpo de Sanidad Militar (comandante), destinado en el Hospital Militar de
Zaragoza, siendo recompensado con la Cruz del Mérito Militar, con distintivo blanco,
por la elaboración de una memoria titulada “Estudio crítico de los Servicios
Generales de los Hospitales militares de la isla de Cuba”.
Respecto a la creación de una
biblioteca escolar, posiblemente fue uno de los pioneros en la implantación de algo
que el Estado tomó en consideración la posibilidad de que los centros escolares
pudieran llegar a contar con una biblioteca para poder despertar en los
discentes “el interés y la afición a la lectura como poderoso elemento de
educación e instrucción”. Su primer reglamento fue publicado en febrero de 1922,
aunque comoquiera que las asignaciones para la compra de libros eran limitadas,
se daba preferencia a aquellas escuelas que ya contaran con una, como era el
caso de Fuendejalón.
Actualmente, la localidad dispone de
una Biblioteca Municipal ubicada en la Casa de Cultura, que lleva el nombre de
Ruperto Aznar, un destacado músico y poeta popular, nacido en Fuendejalón el 27
de marzo de 1878. Cuando se le dedicó merecidamente la nueva biblioteca, posiblemente
se había olvidado ya la figura de quien creó la primera de ellas, al que hoy
dedicamos este recuerdo.
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