D.
Benjamín Bentura Remacha es un personaje muy conocido al que cualquier persona
relacionará inmediatamente con Ejea de los Caballeros, localidad a la que su
familia paterna está vinculada desde hace varias generaciones. Sin embargo,
nació en Magallón, en 1931, y nunca ha ocultado esta circunstancia. Por este
motivo, lo incluimos en el tercer volumen de nuestro Diccionario Biográfico.
Como
entonces señalábamos, es hijo de D. Benjamín Bentura Sariñena, Doctor en
Filosofía y Letras con una importante tesis sobre el virrey D. Joaquín de
Mosquera y Figueroa. En 1929, contrajo matrimonio con Dª Gloria Remacha, hija
del notario de Ejea D. Pedro Remacha, que procedía de Magallón. Por eso, tras
su boda, D. Benjamín se estableció en esa localidad, haciéndose cargo de las
propiedades maternas, durante dos años. Fue entonces, cuando nació Benjamín
hijo, aun cuando su permanencia en Magallón fue corta, ya que, a finales de ese
mismo año, la familia se trasladó a Madrid.
Allí,
el padre ingresó en la Escuela de Periodismo de El Debate e inició una importante carrera, llegando a ser Redactor
Jefe de la Agencia Logos. Pero, sobre todo, fue un gran cronista taurino, algo
lógico, pues los Bentura poseían una ganadería en Ejea, popularizando el
seudónimo Barico.
No
es extraño, por lo tanto, que estos antecedentes condicionaran la trayectoria
personal de Benjamín Bentura Remacha. Licenciado en Derecho, ocupó una plaza de
Técnico Superior en la Diputación de Zaragoza. Como Licenciado en Periodismo trabajó
en diferentes medios de comunicación y, como su padre, fue un excelente
cronista taurino, llegando a fundar la revista Fiesta Española con la que logró un gran prestigio en ese ámbito.
Pero,
además de colaborar en otros muchos medios de comunicación y convertirse en
Decano de los críticos taurinos, es autor de diversas obras, la mayor parte de
ellas relacionadas con el mundo de los toros.
En
nuestra biblioteca disponíamos de algunas de ellas, pero parecía razonable que
de un autor nacido en Magallón estuvieran todas y, en la actualidad, estamos
intentando reunirlas.
Es
curioso que las primeras de las que tenemos noticias se dieran a conocer en
unas colecciones de bolsillo, muy populares entonces, que publicaba la
Editorial Mon. Unas eran biografías como las de Gregory Peck y Helena de
Troya, o las de Pío XII y Juan XXIII, junto El Everest conquistado, en el que se narra la hazaña de Edmund
Hillary, que estamos a punto de recibir. Tenía entonces Benjamín poco más de 20
años.
La siguiente
obra, en orden de antigüedad, que tenemos es un folleto titulado José Fuentes. Lanzado por Rafael Sánchez “Pipo”,
publicado en 1963, dedicado al famoso torero linarenses que, en aquellos
momentos, iniciaba su carrera.
De
1984 es el catálogo de la exposición Arte
y anécdotas del toreo que organizó la Excma. Diputación Provincial de
Zaragoza, en su sala de exposiciones y cuyos textos eran de Benjamín,
funcionario de la casa, y las fotografías del recordado Alberto Sánchez Millán.
En
1988 reunió, bajo el título de Goya y los
Toros, los textos de tres conferencias impartidas sobre temas taurinos. El
primero trata sobre “Aragón, Goya y los Toros”; el segundo está dedicado a “Los
toreros toledanos” y corresponde a una charla que tuvo como escenario un hotel
de Santa Olalla, con ocasión del homenaje rendido al diestro “El Niño de la
Taurina”. El tercero está dedicado a “La dinastía de los Litri” y recoge las
palabras pronunciadas en Calatayud, durante el homenaje tributado al último
exponente de la dinastía, en la peña que lleva su nombre.
También relacionado con
Goya es la obra El regreso a Zaragoza de
Don Francisco el de los Toros, publicado por la Diputación Provincial en
1991, coincidiendo con la inauguración de la escultura dedicada al gran pintor
aragonés en la plaza de toros. El libro
lleva los sellos de pertenencia al “Museo Taurino. Colección E. Asín” que es un
museo privado existente en la capital aragonesa al que no se ha prestado
demasiada atención.
El
arte en Aragón y la fiesta española, publicado en 1993, reúne
los nombres de críticos, poetas, fotógrafos, pintores, escultores y
compositores que han dedicado su atención a la fiesta nacional. La portada la
ilustra una obra de Martín Ruizanglada, que dedicó especial atención a los
toros en su extensa producción.
El
Centro de Estudios de las Cinco Villas le publicó en 1994, una obra importante,
Casta Brava Aragonesa, dedicada a los
ganaderos aragoneses con especial atención a los de las Cinco Villas. En este
caso, en la portada aparece el lienzo de Goya “Apartado de toros”, pues en
opinión del autor, son de procedencia aragonesa las reses inmortalizadas.
La
última obra de la que tenemos noticia apareció en 2004. Se titula Amores y desamores toreros. La vida
sentimental en el mundo taurino y es una amena y divertida crónica de las
peripecias amatorias de un elevado número de diestros que comienza con el conde
de Villamediana y sus “amores reales” para terminar en nuestros tiempos con
referencias a Belén Esteban y a la baronesa Thyssen que también tiene alguna relación
con el ambiente taurino.
Hemos
dejado en último lugar la obra Voces y
Leyes taurinas. Diccionario y Reglamento, pues no figura el año de edición,
aunque por incluir el Reglamento de 1992 tuvo que coincidir con su aprobación.
La reglamentación va precedida por un útil y sucinto diccionario de voces taurinas.
Ya
al margen de la temática taurina se encuentra Zaragoza y su provincia en 20 jornadas que es un libro de divulgación
turística, publicado por la Institución “Fernando el Católico” en 1979, con
referencias a nuestra zona.
Por
otra parte, en la Guía Turística de la
provincia de Zaragoza, editada por Diputación Provincial en 1983, se
encargó del capítulo dedicado a “Cinco Villas de Aragón”.
En
nuestra biblioteca disponemos, también, de catálogos de exposiciones en las que
colaboró. Una de ellos es la de Manuel
Lahoz. Aguafortista. Estampas 1940-1993, que tuvo lugar en Fuendetodos, en
1999, y en cuyo catálogo incluyó un capítulo titulado “Manuel Lahoz, torero y
artista. El otro catálogo es el de la exposición Ramón Dehesa Alamán. Pintor, poeta y músico ejeano (1865-1942) que,
en 2006, se celebró en el Palacio de Sástago y en Ejea de los Caballeros. Fue
comisariada por Benjamín Bentura que escribió un capítulo titulado “Ramón Dehesa
Alamán. Un pintor aficionado ejeano”, además de transcribir sus poesías y
elaborar las fichas catalográficas.
No
son las únicas exposiciones en las que colaboró. Estamos a punto de recibir los
catálogos de otras dos. Las primeras
tauromaquias: Una visión del arte gráfico taurino (Zaragoza, 2003) y Mariano Félez Bentura, un pintor ejeano
entre dos siglos, 1883-1940 (Ejea de los Caballeros, 2004). No hemos
localizado aún los catálogos de otras dos exposiciones más recientes: Los herederos de Berdusán: Pintores y
escultores contemporáneos de Ejea de los Caballeros (2007) y Los Tacchini y su patriarca italiano
(2008). Lo mismo nos sucede con una obra publicada en 2009 con José Claramunt
Traveset, Breve historia del mutualismo
en España y con una comedia, titulada La
barrera, que hemos encontrado catalogada en varias bibliotecas. En
cualquier caso, disponemos de la mayor parte de la producción literaria de este
ilustre ejeano, aunque nacido en Magallón.
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