Otro importante trabajo del profesor Frago Gracia

Acaba de aparecer la obra Lengua, cultura, discurso, editada por EUNSA como homenaje al Prof. D. Manuel Casado Velarde, en el momento de su jubilación. En sus más de 1.300 páginas, se insertan los trabajos de casi un centenar de autores, distribuido en los bloques más representativos que caracterizaron su labor investigadora: “Gramática y Lingüística del texto. Análisis del discurso”; “Lexicología y lexicografía”; “Lenguaje, cultura e ideología. Lenguaje y verdad”; “Lenguaje y educación” y “Lenguaje literario”.  Entre ellos se encuentra el del Prof. D. Juan Antonio Frago Gracia.

El Prof. D. Manuel Casado Velarde, nació el 4 de diciembre de 1948 en Don Benito, localidad de la que es “Hijo Predilecto”. Doctor en Filología Moderna por la Universidad de Sevilla, ha desarrollado su actividad docente en las universidades de Sevilla, Autónoma de Barcelona, La Coruña y Pamplona, donde desempeñaba la cátedra de Lengua Española. Académico correspondiente de la Real Academia Española, es autor de importantes obras, entre ellas una dedicada a su localidad natal: El léxico diferencial de Don Benito. Vocabulario común, así como de numerosos artículos.

         Al Prof. D. Juan Antonio Gracia, nacido en Magallón el 12 de junio de 1940, nos hemos referido en numerosas ocasiones en estas páginas pues, no en vano, es uno de los más brillantes intelectuales que ha dado nuestra comarca. Investigador riguroso y auténtico maestro en los temas de su especialidad, continúa manteniendo una increíble actividad que se refleja en sus constantes aportaciones a diferentes congresos o a través de los artículos publicados en prestigiosas revistas.

         En esta ocasión, aborda una cuestión importante en el trabajo que incluye el libro que estamos comentando: “Valoración lingüística y norma, de los gramáticos a la Academia”. Él, que también es Académico Correspondiente de la Real Academia Española, llama la atención sobre ese “prurito reglamentista” que impera en la corporación, en cierta manera fundamentado en la idea señalada por algún académico en torno a que “la Real Academia Española se plantea como fin prioritario velar por la unidad de este patrimonio singular” que es nuestra lengua, aunque recordando a su maestro el Prof. Lázaro Carreter, otro magallonero ilustre aunque lo fuera por adopción, si la amenaza de disgregación del idioma llegara (cosa que descarta el Prof. Frago) “no habría Academia alguna que lo remediara”.

         Su trabajo viene acompañado con elocuentes ejemplos de perversión en el uso de la lengua, propiciados o refrendados, en ocasiones, por la propia corporación académica. Los de más edad recordamos con nostalgia aquellos “dardos” que desde las páginas de ABC lanzaba el Prof. Lázaro Carreter, en defensa del buen uso del idioma. Qué excelente continuador hubiera sido el Prof. Frago que, por cierto en el epígrafe dedicado a “Variación y buen uso idiomático en diacronía”, cita algunos ejemplos tomados del borjano Juan de Coloma, del que ofreció una magistral aportación en el congreso dedicado a su memoria por el Centro de Estudios Borjanos.