Dentro de la producción artística del pintor borjano D. Baltasar González Ferrández se conservan un buen número de retratos, la mayor parte de ellos catalogados por el Dr. D. Juan Carlos Martínez Calahorra en su tesis doctoral, aunque es muy probable que existan otros que, hasta el momento, han permanecido en paradero desconocido.
Los
retratos de D. Baltasar no eran realizados a partir del natural, sino que como
ya puso de manifiesto el Dr. Martínez Calahorra utilizaba fotografías, lo que
simplificaba notablemente su trabajo. En su libro mostró algunos ejemplos que
venían a demostrar la realidad de este procedimiento.
Ahora,
el Dr. D. Alberto Aguilera Hernández ha podido constatar que lo mismo ocurre en
el caso de este simpático retrato de los hermanos Juan y Marianina de Ojeda Pomares
que fue pintado en 1892 y D. Baltasar dedicó “A D. Alfredo de Ojeda y su señora
esposa, en prueba de profunda gratitud”.
En la
colección que estamos catalogando ha aparecido la fotografía a partir de la
cual hizo el retrato. Fue realizada en el estudio que Enrique Beltrán tenía en
la calle Méndez Núñez de la capital aragonesa y que fue uno de los más
destacados de la segunda mitad del siglo XIX.
Debemos
recordar que los niños Juan y Mariana eran hijos de D. Alfredo de Ojeda
Perpiñán (que fue Alcalde de Zaragoza y Presidente de la Diputación Provincial)
y de Dª. Mariana Pomares de Melgarejo y Miralles de Imperial.
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