San Roque es el Patrón de Ainzón y este año, como ha ocurrido en otros muchos lugares, no pudo celebrar las fiestas en su honor, pero sí se celebraron los actos religiosos y la imagen del Santo estuvo decorada con los tradicionales roscones y los pañuelos de las peñas.
Es esta una tradición muy bonita en la que representantes de cada peña colocan al cuello de la imagen procesional del Santo el pañuelo con los colores característicos de cada una de ellas.
El
párroco bendijo los roscones que decoraban la peana que estaban bañados de
blanco y habían sido elaborados por la panadería Cuartero Sánchez.
El
día de San Roque Ainzón era la última localidad (cronológicamente) en consumir la
culeca que, con “masa dormida” elaboraba Olga Pardo con forma de mujer, los
brazos en jarra y los huevos en la falda. Se ha jubilado y este año no ha
habido culecas, pero Panambel se ha encargado de preparar los roscones que
aparecen en la imagen junto con la botella de ese excelente moscatel,
complemento indispensable para su
degustación.
Nos
ha enviado las fotografías Dª. Eva Frago a la que agradecemos la reanudación de
sus colaboraciones que ya echábamos en falta desde que dejó el Centro de
Interpretación del valle del Huecha en Albeta, desde el que se había convertido
en permanente seguidora de las actividades culturales de toda nuestra comarca.
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