El Aguilucho lagunero occidental (Circus aeruginosus) es una especie de ave muy frecuente en zonas de humedales, en las que suele permanecer todo el año. En la Estanca de Borja hay ahora, por lo menos, tres parejas, de las que Enrique Lacleta ha captado unas preciosas imágenes.
Es una rapaz de tamaño mediano, con unos 120 cm de envergadura,
que presenta un evidente dimorfismo sexual. Los machos tienen un color más
claro, marrón y gris con alas distintivamente de color gris claro, con puntas
negras en su parte inferior. Las hembras tienen su plumaje de color marrón
oscuro y uniforme, con marcas blancas en los hombros y la cabeza. En esta foto
puede verse una pareja en vuelo, mientras que la primera correspondía a un
hembra en reposo.
Es la hembra la encargada de acarrear
ramas para construir los nidos y a una de ellas la captó Enrique realizando ese
transporte, con los aerogeneradores como fondo, a uno de los cuales (el de la
primera imagen) le falta una pala.
Las ramas eran depositadas entre el
carrizal, donde estaba preparando el nido en el que incubará los huevos,
mientras el macho de encargará de la alimentación, para lo que momentáneamente
deberá abandonar el nido. La puesta suele ser de cuatro o cinco huevos, separados
algunos días, por lo que los pollos tienen un tamaño diferente, al nacer en
fechas distintas. Los jóvenes aguiluchos volarán a partir de finales de julio o
principios de agosto.
Muy bonita la secuencia captada por Enrique,
como lo es la que publicaremos mañana con un aguilucho capturando una
inesperada presa.
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