Si hace unos días nos referíamos al “bosque encantado”, como uno de los alicientes para visitar Bureta estos días, hoy queremos dar a conocer la extraordinaria decoración navideña que inunda calles y casas, fruto de un increíble esfuerzo de todos los vecinos.
Recorrer
sus calles representa ir de sorpresa en sorpresa, dado que lo motivos
decorativos surgen por doquier, tanto en las propias vías públicas como en
balcones y ventanas.
Ha
sido Pedro Domínguez Barrios quien, cautivado por lo que veía, nos ha enviado un
buen número de imágenes de estas composiciones logradas con sencillos
elementos.
Viejos
troncos transformados en obras de arte o ventanas decoradas con enorme imaginación,
se suceden sin cesar a lo largo de todo el casco urbano.
Pero
son en esas raíces que rodean las distintas caras de la fuente, donde se
adivina la mano de un artista o de varios que, sin duda, tienen que ser
responsables de este movimiento que se advierte en Bureta en los últimos
tiempos.
Incluso
zonas anodinas han sido objeto de atención por lo que no es de extrañar que
numerosas personas se hayan desplazado ya a Bureta para contemplar tanto su
bosque encantado como este derroche imaginativo de su decoración navideña que,
sin embargo, no utiliza los elementos que definen el sentido de estos días.
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