Ayer, el
historiador D. Santiago Navascués dedicaba el artículo de su interesante sección
“Entender + con la historia” que cada día publica El Periódico de Aragón
en su contraportada, a la figura de Josefa Amar y Borbón, recordando que había
nacido el 21 de febrero de 1883.
Este destacado personaje, que fue ejemplo paradigmático de mujer ilustrada y defensora de los derechos de todas las mujeres, nació en Zaragoza pero era hija del médico borjano D. José Amar y Arguedas, otro ilustre personaje natural de nuestra ciudad, donde se casó y residió toda su vida otra de sus hijas.
Hermano de Josefa era también el último
virrey del Nuevo Reino de Granada, D. Antonio Amar y Borbón, del que nuestro
Centro publicó su biografía de la que es autor Dª. Carmen Pumar. Además, antes
de partir para el Nuevo Mundo donó a la colegiata de Santa María el lienzo de
San Cristóbal que hoy se muestra en su museo, en el que figuran las armas de la
familia. Todos estos detalles vienen a demostrar la vinculación de Josefa Amar
con nuestra ciudad, algo que no suele ser destacado.
Pero, el
artículo de Santiago Navascués va ilustrado con el que, hasta hace poco, era
considerado el retrato de Josefa Amar, reproducido muchas veces, incluso por
nosotros, hasta que en el primer número de la revista Aragón es otra
historia apareció un artículo de Esther P. Nogarol que llevaba por título
“Esa no soy yo. Josefa Amar y Borbón”, en el que revelaba que esa imagen no era
la de Josefa Amar y Borbón, sino que correspondía a otra ilustre escritora posterior.
Se trata de Patrocinio de Biedma y la
Moneda (1845-1927), nacida en Begíjar (Jaén), la cual desde muy temprana edad mostró
especial inclinación por la Literatura. Con 16 años, contrajo matrimonio con un
hijo de marqués de San Miguel de la Vega con el que tuvo tres hijos que fallecieron
muy prematuramente, así como el esposo. Viuda a los 27 años, encontró consuelo
escribiendo. Terminó estableciéndose en Cádiz donde volvió a casarse con el
director de la Crónica Gaditana y archivero de la Diputación D. José
Rodríguez.
En
esa ciudad fue donde desarrolló la práctica totalidad de su producción
literaria que aunó con su defensa de los derechos de la mujer, su entrega a la
causa del pacifismo y su dedicación a la protección de la Infancia, por lo que
fue distinguida con la Cruz de la Orden de la Beneficencia de Primera Clase. De
todo ello, recogiendo la información de Esther P. Nogarol, dimos noticia en
este blog el 14 de julio pasado, como puede comprobarse en este enlace. Pero,
los “descubrimientos” suelen tardar en difundirse, por lo que no es extraño que
se siga confundiendo la imagen de Josefa Amar y Borbón con la Patrocinio de Biedma
y la Moneda, sobre todo porque de la hija del médico borjano no se conoce, por
el momento, ningún retrato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario