Es
habitual en las fiestas de muchas localidades, sobre todo en las menos
populosas, decorar sus calles con pequeñas banderas que alternan los colores de
la enseña nacional, con los de la comunidad autónoma y los del propio
municipio. Así ocurría también en Borja. Sin embargo, hace ya tiempo que, con
ocasión de su renovación, desapareció la de España.
Aunque,
con toda seguridad, este hecho no responde a una intencionalidad que sería
contraria al sentir de la mayoría de los borjanos, parece razonable esperar que
esa ausencia sea subsanada cuando sea posible para evitar interpretaciones
equivocadas.
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