Si
hace dos días señalábamos los problemas de almacenamiento que tenemos en
nuestro archivo, la situación en nuestra biblioteca aún es más grave, dado que
la reserva de espacio quedará agotada este mismo año.
En estos momentos disponemos de algo más de 50.000 volúmenes
entre libros y revistas, siendo constantes las nuevas incorporaciones al mismo
tiempo que nos anuncian donaciones de bibliotecas privadas que superan los
10.000 volúmenes y que, por ahora, no hemos podido incorporar.
Aprovechando
las prácticas que viene realizando en el Centro D. David Cabrejas Sanmartín,
hemos procedido a reordenar espacios y, al mismo tiempo, a efectuar un riguroso
control de los fondos, con objeto de detectar las “pérdidas” producidas durante
estos años, habiendo podido constatar que faltan 69 libros, un número que no es
muy elevado en relación con todo el conjunto, pero que viene a poner de
manifiesto la falta de responsabilidad por parte de los que, en el pasado,
hicieron uso de sus obras, sin devolverlas a su lugar de procedencia.
Ahora,
intentamos recuperar las pérdidas, recurriendo a la colaboración de los
editores que, como en el caso de la Institución “Fernando el Católico” ha
accedido a reponerlas. Sin embargo, hay algunas que, por su rareza o
antigüedad, será más complicado conseguirlas, aunque los vamos a intentar.
Es
preciso agradecer a David Cabrejas el esfuerzo realizado en este cometido, realmente
duro por el trabajo que implica mover fondos en condiciones ambientales
adversas. No es de extrañar que, en algunos momentos, se “desfondase” y añorase
su pasado en algunas líneas fabriles de producción que, en su opinión, era algo
más cómodo que trabajar en el Centro, sometido a un método stajanovista que,
por otra parte, tras estudiarlo teóricamente estaba deseando experimentar.
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