Recuerdo a las víctimas de la Covid-19 en Albeta

         Al mismo tiempo que lo hicieron todos los municipios aragoneses, respondiendo a la iniciativa promovida por el Gobierno de Aragón, los vecinos de Albeta rindieron homenaje a las víctimas de la actual pandemia, congregándose en la placeta del gimnasio para mayores, frente a la iglesia parroquial.

         En el acto intervino, en primer lugar, el Concejal D. Luciano Berna, quien recordó las medidas adoptadas por el Ayuntamiento para proteger a los vecinos, destacando también el comportamiento solidario de todos ellos.

         Un grupo de niños fue el encargado de plantar esa carrasca que simboliza la fortaleza y la resistencia frente a las dificultades. La había remitido el Gobierno de Aragón, junto con una baldosa de cerámica elaborada en el Taller-Escuela de Muel de la Diputación de Zaragoza con la dedicatoria de “Aragón a los que nos faltan”.

Seguidamente, la Concejala Delegada de Cultura Dª. Ana Isabel Pellicer leyó un texto escrito por Manuel Vilas, Premio de las Letras Aragonesas, en el que se apelaba a los valores de libertad y unidad de todos los españoles ante la memoria de los fallecidos por el coronavirus.

         Cerró el acto el Sr. Alcalde D. Pedro Feliciano Tabuenca López con unas palabras en las que manifestó su gratitud hacia todas las personas que habían estado pendientes, durante los meses pasados, para atender en todo momento a la sociedad española, destacando en especial a médicos y personal sanitario, Guardia Civil, Unidad Militar de Emergencias y a los transportistas y trabajadores de servicios básicos, entre otros muchos. Hizo también un llamamiento a los vecinos de Albeta para seguir manteniendo las medidas de seguridad establecidas como, de manera ejemplar, habían venido realizando desde el comienzo de la epidemia.

         En el transcurso del homenaje, los Gaiteros de Albeta interpretaron varias composiciones musicales, troncando en esta ocasión el carácter festivo de sus actuaciones en muchas localidades de nuestro entorno, por el sentimiento propio de un acto de características muy diferentes.