Ayer visitamos de nuevo las obras de restauración del palacio de Bulbuente en las que, día a día, se constata el avance que experimentan. Según nos manifestó D. Manuel Giménez Aperte, está previsto que finalicen al término del verano, lo que puede parecer increíble a quienes no conozcan el ritmo al que ha venido trabajando ese reducido equipo que encabeza el maestro de obras D. Timoteo Melero.
El
patio interior que, en el futuro, acogerá a los visitantes es el espacio más
acabado, pero no el único dado que en las diferentes plantas hay salones y
habitaciones completamente restauradas.
En
estos momentos se trabaja intensamente en el acondicionamiento de lo que será
el jardín posterior del palacio, de considerables proporciones, dado que llega
hasta el Huecha. Al estar configurado por tablas de diferentes alturas, se
estaban construyendo unas rampas que permitan el acceso de vehículos hasta el
propio palacio.
Por
otra parte se está procediendo a la limpieza de la bodega encontrada en el
jardín que no es el único hallazgo realizado últimamente, dado que este
edificio y su entorno sigue deparando sorpresas continuamente.
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