Hemos conseguido un curioso documento consistente en un cuadernillo con tapas de pergamino en donde aparece el título “Libro de las conferencias morales que cuestionó el clero o distrito de la villa de Aranda” que, guarda la relación que comentaremos más adelante, con la localidad de Bisimbre.
Aunque
su estado es deficiente, dado que ha perdido por humedad una parte del ángulo
superior derecho de todos sus folios, sigue teniendo especial interés por el
cuidado y minuciosidad que puso en su elaboración el entonces párroco de la
localidad de Aranda de Moncayo D. Mariano Martínez de Mateo.
Al
comienzo del libro se inserta el decreto impreso por el que el arzobispo de
Zaragoza ordenaba a todo el clero de la diócesis el restablecimiento de las
conferencias morales, dictando las normas por las que las mismas debían
regularse y la obligación de crear un libro en el que quedaran reflejadas las
celebradas, quién las impartió y los que faltaron a ellas.
El
decreto fue firmado en Bisimbre el 22 de mayo de 1827, cuando estaba efectuando
la Visita Pastoral a esa parroquia. Así se hace constar en el mismo que es un
documento que, por sí solo, ya es interesante, dado que el Catálogo Colectivo
del Patrimonio Bibliográfico Español sólo aparece reflejado un ejemplar
existente en el Palacio Episcopal de Segovia, algo llamativo pues tuvo amplia
difusión.
D.
Bernardo Francés Caballero (1774-1843) había sido obispo de Urgel, sede para la
que había sido promovido por su íntimo amigo el rey Fernando VII. Decidido
partidario del absolutismo se exilió en Francia durante el trienio liberal y,
en 1824, fue nombrado arzobispo de Zaragoza donde procuró la reforma de las
costumbres del clero y el incremento de su formación, persiguiendo a aquellos
sacerdotes que destacaban por sus ideas liberales, razón por la cual en 1835 se
desencadenó un motín, como consecuencia del cual volvió a exiliarse en Francia
donde permaneció hasta su fallecimiento. Antes de su salida se había convertido
en ferviente partidario de la causa carlista.
Otra
curiosidad del libro es esta página decorada con un ingenuo dibujo, realizado por
D. Manuel Ramón Lastiesas que sucedió como párroco a D. Mariano Martínez el 6
de mayo de 1832,
En el
dibujo se intenta reflejar el espíritu de esas conferencias morales concebidas
como método de formación permanente para el clero. Debían celebrarse tres días
al mes, dedicando dos a cuestiones morales y una a liturgia y rúbricas.
A
ellas debían asistir todos los clérigos de un distrito que, en el caso de
Aranda, eran los radicados en la localidad más el párroco de Pomer. Cada uno de
ellos debía encargarse de una conferencia a la que los restantes tenían que
presentar cuestiones que fueran objeto de aclaración o debate. Por poner un
ejemplo, en la primera de las que recoge el libro se planteó el tema de si son
válidos los sacramentos administrados por un sacerdote en pecado mortal “con
perseverancia en él”.
Se
debía atender también con especial cuidado al estudio de las rúbricas
establecidas para la correcta celebración de las funciones litúrgicas, incluyendo
el Santo Sacrificio de la Misa, los Sacramentos o el Oficio Divino.
Las conferencias
morales no eran una iniciativa del arzobispo, dado que gozaban de una dilatada
tradición en la Iglesia, pero lo que intentaba era restablecerlas tras años de
abandono, constatando la falta de preparación de algunos sacerdotes.
El
celoso arzobispo recordaba en su decreto “¡Cuántos sacerdotes purgarán acaso
muchos años en el fuego los minutos que robaron a la celebración del Santo
Sacrificio de la Misa!” y ¡Quién sabe, si una Eternidad de tormentos será la
pena con que se castigue el desprecio habitual de las Sagradas Rúbricas
desantendidas...!”.
Conviene
recordar que las conferencias morales como instrumento de formación continuada
del clero continuaron celebrándose en muchas diócesis hasta el Concilio
Vaticano II, tras el cual fueron abandonadas muchas cosas, en aras a una renovación
que cincuenta años después posiblemente no ha discurrido por los cauces que se
esperaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario