El
pilar o pilón de San Antón, situado en la plaza de la Iglesia de El Pozuelo de
Aragón, constituye uno de los elementos más representativos de esa localidad.
Sobre sus características ya se ocuparon Pedro Domínguez Barrios y Manuel
Gracia Rivas en la obra Pilares votivos
que el Centro de Estudios Borjanos publicó en 2011.
Ahora,
Pedro Domínguez nos llama la atención sobre lo que siempre pareció una antigua
hornacina cegada en la parte inferior de una de sus caras, como lo atestiguan
las características de los ladrillos allí situados, diferentes a los del resto
del pilar.
Esto
ha podido constarse a través de una antigua fotografía, difundida en Internet,
en la que se aprecia perfectamente la existencia de esa hornacina en el lugar
señalado por la flecha.
Asimismo, en ella se
aprecia que las gradas en las que se sustentaba el pilar eran de piedra de
cantería, las cuales fueron revestidas con cantos rodados y cemento en fecha
indeterminada.
No obstante, en una fotografía realizada en 1988,
que se conserva en el archivo del Centro, ya aparece la hornacina cegada y el
actual aspecto de las gradas.
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