El viernes, con motivo del reportaje que Heraldo de Aragón dedicó a Trinidad Ruiz Marcellán, tuvimos conocimiento de la Fiesta Poética organizada ayer en Litago, a la que tuvimos la fortuna de asistir.
Los
actos dieron comienzo en la ermita de San Sebastián, en cuyo interior la
Fundación Tarazona Monumental había instalado una exposición con preciosas
fotografías de algunos de los monumentos más destacados de esa ciudad. No pudo
estar presente, por enfermedad, el Gerente de la Fundación D. Julio Zaldívar
Sanz.
Quien
sí se encontraba entre los asistentes era el Sr. Alcalde de Tarazona y Diputado
Provincial D. Luis José Arrechea Silvestre. Asimismo, pudimos saludar al también
Diputado Provincial del Distrito D. Pedro Feliciano Tabuenca López y al Sr.
Párroco de Lituénigo D. Rodrigo Castro Salazar.
Fue
el Alcalde de Litago D. Rafael Ávila Peña quien, con verbo fluido, dio la
bienvenida a todos los presentes y explicó el desarrollo de este acto, impulsado
por el entusiasmo de Trinidad Ruiz Marcellán, contando con el apoyo de diversas
personas.
Una
de ellas fue el ilustre escritor y colaborador habitual en los medios de
comunicación Antón Castro que fue el segundo en intervenir, y lo hizo con su
brillantez habitual pues, no sólo es un gran escritor sino destacado orador.
Hizo referencia a su relación con Litago y con la editorial Olifante donde
publicó alguna de sus primeras obras. Habló de los maravillosos recuerdos que
conserva de sus estancias en estas tierras y finalizó leyendo un hermoso poema
dedicado al Moncayo y a Trinidad.
Habló
seguidamente Josema Carrasco que es el autor de los murales que fueron
inaugurados a continuación, realizados en el Taller Escuela de Muel.
Cerró
el turno de intervenciones Trinidad Ruiz Marcellán que tuvo también palabras de
agradecimiento y explicó el significado de ese punto de Bookcrossing de la
editorial Olifante que iba a ser inaugurado.
En un lateral de la ermita de San Sebastián se encontraba uno de los murales que fueron presentados. Allí estaba presente Jorge Martínez con su guitarra, que además de un gran músico es asimismo destacado poeta.
No
pudimos acompañarlos el resto de la jornada, como hubiera sido nuestro deseo,
por tener que desplazarnos a otros lugar, pero antes de partir visitamos la
ermita del Pilar, en cuyo interior se habían instalado los paneles dedicado a
Bécquer, un escritor que, a pesar de su corta estancia en nuestra tierra, dejó
una profunda huella como lo demuestran los continuos homenajes y recuerdos que
se le dedican.
Junto
a esta ermita está el otro mural, que ya publicamos en nuestro artículo
anterior, en el que puede leerse un poema de Trinidad Ruiz Marcellán. Junto a
ese precioso texto dedicado al boj, puede verse la imagen de la obra de
Valeriano Becquer que lleva por título “La entrega” y que hoy se sabe que
representa a la fiesta mayor de Litago.
También
pudimos ver el interior del gigantesco Pabellón Municipal en donde el Ayuntamiento
ofreció un aperitivo a los participantes en esta hermosa jornada en la que
también pudimos reencontrarnos con personas muy queridas y conocer a otras,
como a María José Sáenz y Mariano Castro, responsables de la Casa del Poeta de
Trasmoz, a los que prometimos visitarlos.
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