domingo, 11 de julio de 2021

Proceso seguido para identificar una fotografía

 

         Fue el 30 del pasado mes de junio cuando dimos a conocer esta fotografía, procedente del archivo Sierra, de la que comentamos que “entre un gran despliegue de seguridad, aparecen descendiendo por las escaleras de la Audiencia unos detenidos. Nos gustaría saber quiénes son, pero el acontecimiento era lo suficientemente importante para despertar esa expectación (incluso miraban desde las ventanas) e inmortalizarlo fotográficamente”. Hemos conseguido dar respuesta a todos los interrogantes y hemos querido explicar el proceso que nos ha conducido a la identificación.



         Yolanda Bandrés nos “corrigió” afirmando que, en su opinión, el edificio era el de la Generalitat, acompañando su comentario de la primera de estas fotografías. Efectivamente, al encontrar la segunda imagen pudimos constatar que la escalera por la que descendían los detenidos era la del palacio de la Generalitat que, anteriormente, había sido sede de la Diputación Provincial, por lo que orientamos nuestra investigación a intentar encontrar explicación a esas detenciones, señalando que el hecho de que supuestamente fuera la sede de la Diputación, “aún añade más interés al documento del que seguimos sin saber cuándo y por qué se llevaron esposados a las personas que descienden por las escaleras entre la Fuerza Pública”.


         Partiendo del hecho de que se trataba de la antigua sede de la Diputación Provincial de Barcelona, decidimos adquirir la Història de la Diputació de Barcelona, una obra en tres volúmenes, publicada en 1987 por la propia Diputación, con la esperanza de que nos ayudara a resolver el problema.

         En primer lugar, tuvimos conocimiento de que, en ese mismo lugar estuvo ubicada la Real Audiencia creada tras los decretos de Nueva Planta a comienzos del siglo XVIII y, posteriormente, la Audiencia Provincial hasta 1908. Ya nos lo había apuntado desde Barcelona Ignacio Gracia, por lo que nuestra primera identificación era correcta.


         Pero, además, en la página 341 del primer volumen encontramos esta fotografía, muy similar a la que había dado lugar a la indagación. Correspondía a la llegada a la sede de la Audiencia de los acusados en el llamado “proceso Rull” que, en abril de 1908, fue el último que se vio allí, dado que ya estaba a punto de ser inaugurada la nueva sede de la Audiencia.


         A partir de esa pista proseguimos la investigación en torno a ese proceso, localizando una revista que le dedicaba especial atención, con gran despliegue gráfico, dado el interés que despertó ese juicio y una de las fotografías corresponde al momento de la salida de los detenidos y ésta es ya prácticamente igual que la nuestra.


         Hemos adquirido la revista, que aún no nos la llegado. En su momento ofreceremos más detalles sobre ese caso que atrajo la atención del público, pero podemos adelantar que el protagonista del mismo fue Juan Rull i Queraltó, que aparece en esta fotografía quien, con la ayuda de sus padres y de su hermano, se dedicaba a colocar bombas aunque, haciéndose pasar por confidente de la policía, sólo las hacía explotar si las autoridades no le entregaban las cantidades económicas con las que “compraba” la voluntad de los anarquistas que supuestamente las colocaban.

         Descubierta la trama fueron detenidos los miembros de ese clan de los Rull y otro personaje apellidado Perelló. En el juicio fueron condenados a muerte Juan y su hermano Hermenegildo, así como su madre María Queraltó, pero al final estos dos últimos vieron conmutada la pena capital por la de cadena perpetua, siendo Juan el único en ser ejecutado el 8 de agosto de 1908, por el procedimiento de garrote vil en la cárcel Modelo.


         Por lo tanto, podemos afirmar ya sin ningún género de duda que la foto fue tomada en 1908 en las escaleras de la que entonces era sede de la Audiencia Provincial, en el momento en que salían de una de las sesiones del juicio, los miembros del clan Rull, siendo Juan Rull ese elegante personaje señalado con una flecha, el único que al final fue ajusticiado.


 






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