Información sobre el proceso Rull

         Cuando identificamos una de las fotografías del archivo Sierra como correspondiente a la salida de la Audiencia Provincial de Barcelona de los procesados del denominado caso Rull, afirmamos que ello había sido posible gracias a una foto similar encontrada en la revista Nuevo Mundo que nos proponíamos adquirir.

         Nos han llegado ya las hojas de dos números de la misma, en las que se informaba acerca de ese proceso que tanta expectación despertó. Decimos “las hojas” dado que algunos vendedores tienen la costumbre de vender por páginas los ejemplares de las revistas, como ha ocurrido en este caso.

         Nuevo Mundo era una revista ilustrada, fundada en 1894, que se editaba en Madrid y que se caracterizó por las excelentes fotografías que incluía, en contraste con otra histórica publicación como era La Ilustración Española y Americana que recurría a los grabados, muchos de ellos a partir de fotografías.

         Como es lógico el proceso en la Audiencia de Barcelona recibió amplia cobertura en forma de extensos reportajes de los que hemos conseguido los aparecidos en los números 743 y 744, aunque probablemente hubo más, entre ellos el correspondiente a la ejecución del principal implicado, Juan Rull. Como puede verse en esta foto, la amplia sala de la Audiencia que, como hemos indicado en artículos anteriores, se encontraba aún ubicada en el actual Palacio de la Generalitat, estaba completamente llena de público.

         Algunas de las imágenes más llamativas correspondían a la salida del furgón celular de Cárcel Modelo y de su llegada a la Audiencia. Como puede verse el vehículo en el que eran conducidos los acusados era tirado por dos caballos y escoltado durante el recorrido por unidades montadas de la Guardia Civil.

         Una de las páginas estaba dedicada a todos los implicados en la trama terrorista, entre los que se encontraban los padres de Juan Rull y un hermano. La madre aparece en la segunda fotografía descendiendo por la escalera que dio lugar a esta investigación. Como ya comentamos, fue una de las condenadas a muerte, aunque finalmente le fue conmutada esa pena por la de cadena perpetua, al igual que a su hijo Hermenegildo.

         También se mostraron imágenes de las viviendas relacionadas con Juan Rull y del químico Maurició Bernardon que le enseñó a fabricar bombas, así como de varios destacados personajes de la Política y de los medios de comunicación que comparecieron como testigos en el juicio.