sábado, 20 de abril de 2024

Curiosidades en torno a la producción vitivinícola

 

         Ha llegado a nuestro poder un interesante folleto, editado en Tudela en 1887, en el que se recoge un extracto de la reunión que, convocada por el Centro de Agricultores, Ganaderos y Propietarios de Tudela, se celebró el 29 de julio de ese año de 1887, con asistencia de representantes de los viticultores de los distritos de Alfaro, Calahorra, Borja, Tarazona, Tafalla y Tudela.




         Nos ha interesado especialmente, tanto por los temas abordados como porque, en las páginas finales, se incluyen los nombres de todos lo que acudieron debidamente acreditados. Estos eran los de los llegados de la mayor parte de los municipios que hoy integran la Denominación de Origen “Campo de Borja”:

Ainzón: El Alcalde D. Delfín Milagro D. Antonio Omedes y D. Benigno Álvarez; de Bisimbre: D. Cipriano Sarría; de Borja: D. Amado Badía y D. Tomás Rodrigo Jiménez; de Fréscano: D. Bartolomé Navarro Cuartero; de Fuendejalón: el Alcalde D. Mariano Rodríguez y D. Joaquín Martínez; de El Buste: D. Paulino Bonel y D. Pío Jiménez; de El Pozuelo de Aragón: D. Santiago Cuartero; de Magallón: D. Manuel Cuartero, D. Julio Aisa, D. Vicente Baucho y D. Esteban Liso; de Maleján: D. Tomás Rodrigo Jiménez (que también representaba a Borja); y de Vera de Moncayo D. Lucas Pablo Sáinz.

 

Pero, lo que más nos ha sorprendido es el motivo que los había convocado. En principio, hubiéramos pensado que podía haber sido la amenaza del mildew o de la filoxera u otros problemas de nuestros viñedos. Sin embargo, el motivo de la preocupación era el perjuicio que estaba ocasionando la masiva importación, fundamentalmente de Alemania, de alcohol de producción industrial con el que, en algunas zonas, se aumentaba la graduación de sus vinos para acceder al mercado francés.

Consideraban los viticultores que tanto sus intereses como los de las destilerías locales resultaban seriamente perjudicados, aduciendo además razones “sociales” pues, en su opinión, mientras que el vino natural provoca, en el consumidor “tendencia a la alegría y después al sueño profundo”, el adulterado con alcoholes industriales produce “una violenta excitación, desarrollando (en el consumidor) una violenta excitación y un verdadero delirio de persecuciones, causa de tantos crímenes y disgustos en el seno de las familias”.

En el debate intervinieron el representante de Borja D. Amado Badía; el de Vera de Moncayo D. Pablo Lucas, el de Ainzón D. Benigno Álvarez, y D. Tomás Rodrigo, siendo los de esta zona los más activos a la hora de apoyar las propuestas formuladas.

Lo que querían era una modificación de los aranceles y un control de esos alcoholes importados. Pero, comoquiera que en otras zonas de España las opiniones eran diferentes, el Gobierno tardó en reaccionar y no lo hizo acorde con lo que aquí se pretendía.

En cualquier caso, la lectura del folleto nos ha impulsado a retomar el tema de la producción de vino y de su historia, encontrando con muchas cosas curiosas sobre las que habremos de volver, pues lo cierto es que no disponemos de un estudio serio y completo sobre tema tan interesante.



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