En 2014, la Dra. Dª. Rebeca Carretero Calvo publicó. en la revista De Arte, un artículo que llevaba por título “Algunas esculturas napolitanas en la diócesis de Tarazona (Zaragoza)”, en el que dedicaba un apartado a “Las dos napolitanas de Borja”. Hemos querido recordarlas porque ambas no son suficientemente conocidas.
No es el caso de la del convento de la
Concepción que, por su belleza, fue siempre objeto de especial atención y ya
fue reproducida en una de las primeras postales de nuestra ciudad, realizada
por Juan Mora Insa, que es la que figura más arriba.
De hecho, todos los fotógrafos que se
interesaron por el Patrimonio Artístico de nuestra ciudad la hicieron objeto de
su atención. La primera de estas imágenes pertenece al archivo de la familia
Ojeda, mientras la segunda, muy bonita, la hizo D. Federico Bordejé en la
hornacina en que se veneraba en el convento.
Conocida siempre, como “La Napolitana”,
ha venido siendo la protagonista de la fiesta votada que, cada año, se celebra
en la iglesia del convento. Así era como la habíamos conocido hasta que, tras
su participación en varias exposiciones, fue sometida a una serie de restauraciones
que modificaron su aspecto y sobre todo la disposición de los angelotes que la
rodean.
En una primera fase fue presentada con
tres angelotes y el manto de intenso color azul. del que habían desaparecido
las estrellas, hasta que, posteriormente, adoptó el aspecto actual que muestra
la segunda fotografía.
Ignoramos los criterios que se tuvieron
en cuenta para variar la posición de las figuras, pero nos sorprendió el cambio
experimentado por la ubicación del monstruo que representa al demonio que, originalmente,
estaba a la izquierda con una cadena al cuello que sostenía uno de los
angelotes. Lo colocaron en el centro, colgado a la manera de un murciélago y
sin cadena, dispuesto a volar…
Se puede admirar cada 8 de diciembre, el día de su fiesta en la que también sale en procesión. Estamos ante una obra de especial importancia que ha sido atribuida a Gaetano Patalano (c.1655-1700) un escultor barroco italiano de la zona napolitana.
La atribución se basa en las semejanzas
que se advierten con otras obras de ese autor, como las de estas fotografías,
correspondientes a dos imágenes conservadas en la ciudad de Lecce. En España
trabajó también en la catedra de Cádiz.
Pero, así como la Napolitana de la
Concepción es bien conocida, no lo es tanto la del convento de Santa Clara que
presidió el coro bajo y, en la actualidad ocupa una de las hornacinas laterales
(la de la izquierda).
Para la Dra. Carretero es de mucha
menor calidad y también ha sido objeto de diversos repintes, a pesar de lo cual
apunta la posibilidad de que sea una obra temprana de otro escultor napolitano,
aunque había nacido en Este (Padua): Giacomo Colombo (1663-1761).
Llegó a ser un escultor importante y,
entre otras obras, es el autor de la Virgen de la Caridad, la Patrona de la
ciudad de Cartagena, a la que puede verse en esta fotografía con un detalle
significativo: las varas de mando depositadas a sus pies pues, desde 1994, la
Virgen es Alcaldesa Perpetua de la ciudad.
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