Un buen número de personas se dieron cita en la tarde de ayer, en la ermita del Sepulcro, para participar en la “Salve Galana”, la ceremonia que pone fin a la Semana Santa borjana y que tiene como significado el felicitar a la Virgen en el día glorioso de la Resurrección de su Hijo.
Algunas llegaron en coche, pero, otras
muchas, se animaron a hacerlo andando lo cual entraña alguna dificultad, dada
la pronunciada cuesta de la carretera del Santuario en la que se encuentra esta
ermita.
Se trata de un acto sencillo, pero
entrañable en el que D. José Miguel Pallás Aragón dirigió las preces que pudieron
recitar los asistentes, merced al díptico que les había sido entregado. Al finalizar
las mismas, D. Mariano Irache Cabañero entonó el Regina Coeli letare y, seguidamente
D. Raúl Rivarés lo hizo con la auténtica “Salve Galana” que es la misma que se
canta en la novena de la Virgen de la Peana y que, por fin, volvió a
recuperarse este año.
Posteriormente, muchos de los presentes
pasaron a venera la reproducción de la imagen yacente que vino a sustituir a la
original, una excepcional terracota de Gregorio de Mesa, que fue llevada al
Museo de la Colegiata para garantizar su seguridad.
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