Visita a Anento, uno de los pueblos más bonitos de España

 

         Anento es una localidad perteneciente a la comarca de Daroca que cuenta con poco más de 100 habitantes que, sin embargo, por el cariño y la dedicación que le han dedicado han hecho posible que, en la actualidad, sea uno de los “pueblos más bonitos de España”. Allí estuvo recientemente Enrique Lacleta y nos ha traído unas fotografías, tamizadas por la luz del atardecer, que queremos dar a conocer como ejemplo de lo que puede hacerse para conservar el Patrimonio y su entorno.

         Uno de sus principales atractivos es el “Aguallueve” que, como se explica en la excelente página del Ayuntamiento,  es una formación caliza, donde varios manantiales, surgidos de los acuíferos del Campo de Romanos, han creado un espectacular relieve kárstico.

La humedad que proporcionan esos manantiales hace posible la conversión de todo el entorno en un lugar paradisíaco que sorprende al visitante.

         Pero, otro tanto ocurre al recorrer sus calles, con sus edificios completamente restaurados, limpias y extremadamente cuidadas, en las que se suceden los rincones con encanto.

         A ello contribuyen las flores que pueden verse por doquier, como lo atestiguan las fotos de Enrique que tuvo la fortuna de visitar la localidad cuando estaban en plena floración.

         El monumento más importante de la localidad es la iglesia parroquial de San Blas, románica del siglo XIII, al que en el XIV se le añadió un bonito pórtico gótico. Lo que no pudieron ver los expedicionarios, por la avanzado de la hora es el espectacular retablo gótico de Blas de Grañén que, por sí solo, ya justificaría una visita a Anento.

         Otro monumento de interés es la pequeña ermita de Santa Bárbara que tiene un retablo de comienzos del siglo XVII y que, como puede apreciarse, está asimismo muy bien cuidada.

         Enrique fotografió también el peirón de la Virgen del Pilar que se encuentra en el camino que conduce al Aguallueve y que, como no podía ser menos, está en perfecto estado de conservación.

 

         Lo que no tuvieron tiempo de visitar fue el castillo, cuyos restos fueron objeto de una intervención en 2010, con un importe de 239.782 euros, el 50 % de los cuales fueron aportados por el Ministerio de Fomento con cargo al 1,5 % cultural y el otro 50 % por el Gobierno de Aragón. Las obras fueron adjudicadas a la empresa Rafael Vega S. L. por un importe sensiblemente menor. El resultado de la intervención es el que muestra la segunda imagen, sin que hayamos encontrado comentarios al mismo.