Nuestro último recorrido por Añón nos dio para varios reportajes ya que encontramos muchas novedades. Además, de una decoración que no sabemos si era navideña o invernal, encontramos varias jotas reproducidas en palets colocados en las paredes.
Un de ellas, la conocida de los
pastores que hemos podido recordar en la voz del legendario José Iranzo “El
pastor de Andorra”, que podrán escuchar en este enlace.
Otra de ellas estaba sobre el antiguo
pilón de la plaza de la iglesia, ahora convertido en jardinera. Preciosa jota con
letra y música de Francisco de Val, un compositor aragonés (de Villafeliche)
autor de obras muy conocidas, aunque pocos recuerden su figura. Para
escucharla, hemos elegido este vídeo en el que la interpreta Javier Soriano.
Al pie de la placa dedicada al marqués
de Santillana, junto a la iglesia parroquial han colocado un poema popular en
el que se recuerdan los amores con una pastora de Añón que no accedió a sus
pretensiones. Lo reflejó en una de sus serranillas:
Partiendo de Conejares,
allá suso en la montaña,
cerca de la Travesaña,
camino de Trasobares,
encontré moza lozana
poco más acá de Añón,
riberas d'una fontana.
Traía saya apretada,
muy bien fecha en la cintura;
a guisa de Estremadura,
cinta e collera labrada.
Dije: «Dios te salve, hermana;
aunque vengas d'Aragón,
d'esta serás castellana».
Respondiome: «Caballero,
non penséis que me tenedes,
ca primero probaredes
este mi dardo pedrero;
ca después d'esta semana
fago bodas con Antón,
vaquerizo de Morana».
En la misma plaza está el busto
dedicado a Gustavo Adolfo Bécquer otro ilustre escritor relacionado con una
población que es fuente de inspiración para todos los que la visitan y algunas
de cuyas rimas han sido reproducidas en el espacio al que hicimos alusión en otro
artículo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario