Sobre la serie de Castillos de España

         Ayer finalizábamos la serie que, durante varias semanas, hemos dedicado a comentar las postales que, sobre “Castillos de España” forman parte de una colección que no hemos llegado a completar, dado que tenemos hasta el nº 121 pero de la que aún nos faltan 20. Son, por lo tanto, alrededor de 100 los castillos sobre los que hemos ofrecido imágenes y datos.

         Quedaron “olvidadas” fortalezas importantes como el Alcázar de Segovia, actual sede del Archivo Histórico Militar y un monumento de singular belleza; o el castillo de Medina del Campo que fue sede de un centro de formación de la Sección Femenina y, actualmente, depende de la Universidad de Valladolid. En él, disfrutamos de una estancia inolvidable con motivo de la celebración de uno de los congresos de Historia de la Náutica al que siguió otro celebrado en Borja.

         Durante nuestro recorrido hemos podido comparar la situación de esos castillos, a mediados del siglo XX, y su estado actual. Muchos de ellos, han sido restaurados y destinados a fines diversos, desde establecimientos hoteleros a museos o centros de interpretación, aunque no faltan los que siguen en un estado de lamentable abandono o su restauración sigue siendo parcial, como es el caso del castillo de El Barco de Ávila que aparece en la imagen.

         No obstante, la situación es cambiante y un ejemplo de ello lo constituye el castillo de Butrón que, cuando escribimos el artículo, se encontraba cerrado y a la venta, tras una etapa de esplendor en la que tuvimos la ocasión de visitarlo. Sin embargo, hace muy pocos días, se ha hecho público su adquisición a la empresa INIBSA, que era la propietaria, por un magnate ruso que ha pagado la cantidad de cuatro millones de euros, sin que se conozcan, por ahora, sus intenciones.

         Tenemos el propósito de completar la colección de postales, cosa nada fácil y, en su momento, comentaremos las que nos vayan llegando. A quienes les hayan parecido muchos los castillos reseñados, debemos señalar que España dispone de miles de ellos y, en el caso concreto de Aragón, cuando a comienzos de este siglo se realizó un inventario de los existentes, su número superaba los mil de los que, una Orden de 17 de abril de 2006, 516 recibieron la declaración específica de “Bien de Interés Cultural”.