Las comidas y almuerzos que, elaboradas por los cocineros voluntarios de la plaza del Mercado, cuentan con nuevas “instalaciones” que pudimos fotografiar el día de su estreno.
Se trata de una bonita carpa con abundantes
“logotipos” del M. I. Ayuntamiento para que se advierta bien la propiedad de la
misma bajo la que se estaba preparando, en un gran recipiente, el guiso que se
sirvió en comida popular del pasado lunes.
Lo que ha sorprendido este año han sido
las escasas atracciones instaladas en el ferial, prácticamente reducidas a dos
tiovivos, unas camas elásticas y un artefacto más complejo. Ignoramos si ya no
despiertan interés entre los padres, si la ubicación influye en ello o si hay
otras razones que ignoramos, pero lejos quedan los tiempos de casetas, autos de
choque y atracciones variadas. No nos extrañaría que volviéramos pronto a otros
anteriores de barcas, columpios y “cadenas”.
Al lado, la plaza portátil, escenario
de otro percance, el segundo en estas ferias, provocado al saltar un toro al
callejón, ocasionando lesiones a una de las personas que allí se encontraban,
que tuvo que ser evacuada e intervenida quirúrgicamente, a la que deseamos una
pronta recuperación.
También ha
llamado la atención la ausencia de iluminación en varias de las caras de las
torres de Santa María. En la de las campanas, se encienden y apagan
aleatoriamente. Pero ello no se debe, como algunos han supuesto, a
restricciones energéticas, sino a fallos en los proyectores que hace tiempo ya
dimos a conocer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario