viernes, 10 de marzo de 2023

Gallur en una curiosa revista

 

         Un buen colaborador de nuestro Centro nos ha remitido imágenes de una revista que no conocíamos, pero que ya hemos localizado y adquirido (aunque aún no nos ha llegado). Llevaba por título Vida Gráfica Española, de la que apenas hemos conseguido reunir información, salvo que se editaba en San Sebastián y que inició su publicación en 1929, sin que sepamos cuándo dejó de aparecer. No hay que confundirla con la revista Vida Gráfica, de Málaga, que se editó entre 1925 y 1936.


         El número que nos ocupa, de octubre de 1929, tuvo carácter extraordinario y en sus 240 páginas ofrecía amplia información sobre las Exposiciones Internacionales de Sevilla y Barcelona, así como reportajes de las tres provincias aragonesas, con mención expresa a determinadas localidades de ellas.

         En el caso de Zaragoza, aparecía Borja y Gallur. A esta última población corresponde el curioso encarte que reproducimos, con anuncios de la “Nueva Harinera Cinco Villas”; Casa Alayeto y la fábrica de aceite de Tomás Espuny, además del Crédito Agrícola del Ebro, que fue un banco local de Gallur, absorbido más tarde por el Banco Zaragozano. Sería interesante dar a conocer la historia de esa peculiar entidad de crédito.

 

         Lo que no tiene desperdicio es el texto del encarte, en el que se afirma que Gallur, en esos momentos, tenía 2.886 habitantes de hecho y 2.847 de derecho, lo que no coincide con los datos que se ofrecen en Wikipedia, en donde para 1930 (un año después de la publicación de la revista) se indica que eran 3.864, mil más que doce meses antes, lo que es completamente imposible. Sin embargo, el gráfico nos permite hacernos una idea de la evolución demográfica del municipio que llegó a tener cerca de 4.500 habitantes en la década de los años 60 del pasado siglo (algunos más que Borja en determinados momentos) y, en 2022, tiene 2.563, según datos del INE.

         Aunque no muy bien redactada, la información que ofrece el encarte constituye, más bien, una apasionada loa hacia la labor de las autoridades municipales del momento. Lamentablemente, no sabemos quién ocupaba la alcaldía entonces, pero a juzgar por lo que se afirmaba, los vecinos de Gallur estaban entusiasmados con los logros alcanzados por sus munícipes en Educación, Higiene y “otros servicios de perentoria necesidad”.



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