Cuando dimos a conocer las fotografías que, sobre los grafitos existentes en los calabozos de Magallón, nos había remitido Pedro Domínguez Barrios, nos atrevimos a sugerir que la figura representada a la izquierda de esta imagen podría corresponder a la de una bruja, a caballo sobre tosca escoba.
Pero la supuesta bruja forma parte de
una escena que, en su totalidad, puede verse en esta otra foto y aquí,
evidentemente, la “escoba” adquiere otro significado, porque parece ser un
instrumento en manos del otro personaje. Comoquiera que, al lado, hay un
caldero Jorge Andía nos proponía en Facebook una interpretación sumamente
sugerente.
Acompañándola de reproducciones de
grabados, alguno de ellos de Goya, sugería que lo que se representaba en
Magallón era la administración de una lavativa, por medio de una gran jeringa,
como las utilizadas para estos menesteres y, por ello, el caldero adjunto cobra
sentido al ser el recipiente del que se habría tomado el agua.
Destacamos la sagacidad de Jorge porque
su propuesta nos parece mucho más acertada que la de la bruja, la cual ya nos
parecía muy endeble. Lo que no cabe duda es que, de confirmarse, la lavativa de
Magallón se convertiría en una obra escatológica digna de ser difundida.
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