Estábamos escribiendo el comentario sobre la nieve de Vozmediano cuando Ramiro Adiego nos envió el enlace con su blog “El nido de águilas del Moncayo”, donde había colgado imágenes de la copiosa nevada caída en Purujosa.
Ramiro no ha sido solo un activo
colaborador de nuestro Centro y, coautor, con el Dr. Aguilera Hernández, de
varios de los inventarios del Patrimonio Artístico Religioso que hemos
publicado; concretamente los de Purujosa, Bulbuente y Maleján.
Pero, además, fue la persona que nos
ayudó en los inicios de este blog, cuando no teníamos ni remota idea acerca de
su funcionamiento. Fue en 2011 cuando nuestro Presidente decidió poner en
marcha esta iniciativa que, contra lo que algunos pudieran pensar, no es un
blog institucional sino personal y es él quien lo financia con las aportaciones
mensuales imprescindibles para poder almacenar tan elevado número de imágenes,
a las que se suman hoy las de Ramiro Adiego.
Preciosas fotografías del aspecto que
presenta una localidad especialmente bella, tras recibir una buena cantidad de
nieve. Pero, al margen de ella, hay algo que hace de Purujosa un ejemplo
sorprendente de la recuperación de una localidad que era un claro exponente de
esa España vaciada que algunos consideraban irrecuperable.
Porque Ramiro en su artículo nos habla
de las obras en marcha para rehabilitar muchas de sus casas. Ya lo habían sido
otras, así como sus calles, de manera que el aspecto de la localidad era muy
diferente del que habíamos conocido años atrás, con calles desoladas y casas en
ruinas.
Ha sido el tesón de sus antiguos habitantes
y el de otras personas que se han sentido purjosanas las que propiciaron el
milagro de la revitalización de un municipio que, a la belleza de su
emplazamiento, une la del espectacular entorno en el que se asienta. A quienes
no hayan estado nunca allí, les aconsejamos que vayan. Es una excursión que
merece la pena.
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