Fotografías mejoradas

 

         Hace unos días, publicamos esta fotografía de un amanecer desde la planta alta de la Casa de Aguilar y comentábamos que una de las ventajas de iniciar nuestro trabajo cuando todavía es de noche, es la posibilidad de contemplar, con cierta frecuencia, la salida del sol sobre los tejados de Borja que tanto sorprenden a nuestros visitantes, aunque se vean poblados de antenas de televisión.

         Pero José María Belsué ha mejorado la fotografía, eliminando pacientemente todas las antenas con el resultado que aquí se ofrece. La capacidad de alteración de la realidad que permiten determinados programas pone en cuestión la veracidad de muchos documentos gráficos.

         En este sentido, recordamos cómo, durante nuestra labor como evaluadores de las candidaturas a los Premios Europa Nostra, tuvimos que informar de una de ellas que, por la distancia a la que se encontraba no pudimos visitar. Nos “fiamos” de las fotografías que acompañaban a la documentación presentada en las que podía verse la restauración de unos molinos cuyo precioso perfil se recortaba sobre un cielo azul surcado de nubes. Fue tiempo después cuando nos comunicaron que todas esas imágenes habían sido “retocadas”, pues los monumentos estaban parcialmente ocultos por unos edificios anodinos que habían sido borrados como las antenas de nuestra foto y, además, se les había dotado de un bonito fondo para resaltarlos aún más. Ni que decir tiene que, desde entonces, es obligatorio visitar todos los proyectos que se presentan a esos premios, lo que nos ha permitido detectar otras falsificaciones no menos significativas.

         Volviendo a nuestros amaneceres no son las anteriores las únicas fotografías que hemos publicado. Estas otras, incluso con las antenas, también son muy bonitas. Hay más, dado que estos días estamos catalogando fotografías pendientes, un trabajo bastante duro, pero que hay que acometer para poder manejar el nutrido archivo de imágenes que tenemos que, en estos momentos, supera las 140.000. Pero, tan sólo de los dos últimos años tenemos pendientes de catalogar unas 10.000 de las realizadas con la cámara del Centro, más todas las que nos llegan de diferentes procedencias. El trabajo consiste en numerar correlativamente las fotografías y, posteriormente, reflejar todos los datos relacionados con ellas en un fichero FileMaker que permite su posterior búsqueda, siempre y cuando hayan sido correctamente clasificadas.